MACRI / KICILLOF |
(U24) - Un tema muy visible en el Frente de Todos es el de los intendentes bonaerenses. Es sabido, sobre todo porque se dejó trascender y tuvo su impulso desde el oficialismo, el malestar de varios jefes municipales del GBA por la candidatura de Axel Kicillof, que "tira para abajo".
En efecto, a ello mismo apuntó Alberto Fernández cuando les advirtió a los intendentes que "no juegan con la tijera". Sin embargo, ese riesgo existe aún más potenciado para Juntos por el Cambio que para el kirchnerismo.
Para el oficialismo, es tan preocupante sostener al Presidente Mauricio Macri, como atraer votos para gobernador con corte de boletas ajenas y frenar cualquier impulso a jugarse solos entre los intendentes propios.
El primero en llevar la consulta a los oídos de la gobernadora bonaerense, María Eugenia Vidal, fue el intendente de Quilmes, Martiniano Molina. Dada la pareja elección en su territorio, el ex cocinero dialogó con los armadores políticos de Vidal, su jefe de Gabinete, Federico Salvai, y el subsecretario de Asuntos Municipales, Alex Campbell, para pedir permiso de cortar boleta.
Luego se fueron sumando el resto. "¿Qué les vamos a decir? ¿Que no lo hagan? Ellos tienen que defender también su pago y al final del día somos un espacio político. Es entendible que hagan eso, yo en su lugar haría lo mismo", explicó una calificada fuente al tanto de la situación.
En Pilar, el intendente Nicolás Ducoté también planteó esa estrategia. Además del corte, recibió el apoyo explícito de Vidal y de la diputada nacional Elisa Carrió, ya que en su distrito incluso el electorado más oficialista le resulta adverso. Sobre todo después de la polémica con las termoeléctricas.
Luego llegaron el resto de los jefes comunales quienes plantearon la medida por ahora de forma exclusiva para las PASO. "Después de agosto la charla es otra", explicó uno de los intendentes que llevó sus dudas ante Vidal. Pero aunque cerca de la gobernadora naturalicen la situación y digan que "nadie va a salir a cazar 'traidores' como hace el peronismo", los intendentes le temen al brazo aleccionador del jefe de Gabinete, Marcos Peña, intransigente con los dirigentes que especulan, según publicó 'Clarín', que habla del tema como "tabú" entre los propios.
"La foto de las PASO va a mostrar quién jugó bien para sostener la boleta completa en cada distrito y quien pasó con la tijera", advirtió un estratega de campaña, que marca que de cara a las generales el "instinto de supervivencia" pesará más: "El que vea que con eso puede ganar, lo va a hacer", conceden en el oficialismo. Ocurre que el rechazo al presidente Macri en muchos de los distritos del conurbano, en especial en la tercera sección electoral, no es novedad. En el caso del Frente de Todos, Alberto Fernández y Cristina están más arriba que Kicillof, quien es acá el que "tira para abajo".
Sin embargo, dado que la boleta tiene 5 cuerpos, y que el primero es a presidente, no es difícil intuir que resulta más sencillo eliminar a Macri que cortar por el exministro de Economía en el tercer cuerpo. Eliminar el "factor de baja" en el cuerpo número uno implica un solo corte, eliminarlo en el cuerpo número 3 implica dos cortes.
Entonces, ¿por qué instalar la idea de que el corte de boleta es un problema para los Fernández? Justamente, porque la verdadera preocupación por el corte reside en Cambiemos, ahora Junto por el Cambio. No hace falta decir que, además, la diferencia de puntos que, según el grueso de las encuestas, tiene Cristina sobre Macri en el Conurbano, no es para nada desdeñable.
No hay comentarios:
Publicar un comentario