El luto por la muerte de Cristian Gómez fue apenas una arista de un golpeado y maltrecho fútbol argentino. El final del domingo y la jornada del lunes concertaron la opinión generalizada y la pregunta que cae de madura: ¿Hay que parar el fútbol?
Próximo al receso por la Copa América, este martes se dará a conocer con más detalle el retorno de la actividad y la continuidad de los torneos, aún con la idea firme en algunos estratos de la casa madre del fútbol argentino de plantear un cambio que pueda significar una “mejora” eventual del alicaído estado en el que se encuentra el fútbol argentino.
No faltan aquellos que especulan con un contexto que será más propicio si Argentina gana la Copa América, algo que devolverá el entusiasmo al futbolero “tipo”.
Mientras, pensando en lo que pasa realmente dentro del fútbol doméstico, en la institución máxima piensan que habrá que diseñar un borrador para aplicar cambios que contengan cuestiones de organización y un “reacomodamiento” después del desastre mundial que fue el partido entre Boca y River por la Libertadores.
El panorama del domingo fue desolador. Además de la muerte de Gómez, se sabe que veníamos de una semana anterior con el duelo por la muerte de Emanuel Ortega, se agregó la desolación de la cancha de Boca y luego los hechos de violencia en Mendoza en el partido Godoy Cruz 1-Belgrano 0.
Después de la suspensión y del grito en el cielo de algunos actores, con más acusaciones (suspendieron Tigre-River) en el camino, ayer la frutilla de la torta sucedió en un partido para festejar los cumpleaños de Platense y de River, pero todo se volvió a enturbiar: violentos ingresaron al campo de juego y robaron la indumentaria de los protagonistas.
Toda esta ensalada también pone en el tapete a la “seguridad” en el fútbol, los cambios de planes cuando se altera una fecha como el fallecimiento de uno de sus actores y la falta de cintura por parte de una dirigencia completamente enfrentada.
Los tiempos políticos en la AFA también se suman a un desmanejo visiblemente improlijo en el pos grondonismo (quizás ese mismo desmanejo no era tan visible en la época de Don Julio). Este lunes, las dirigencias se tomaron un respiro.
Los reclamos en Belgrano por parte del entrenador Ricardo Zielinski y el presidente Armando Pérez terminaron por decorar un sistema en completa crisis. Jugar, cortar y pensar.
Desde la AFA se confirmará este martes el retorno a la actividad oficial. Mañana habrá partidos de Copa Argentina. También habrá mañana partidos del Torneo Federal A. Y todo volverá a su curso “normal”.
El fútbol en suspenso vuelve a rodar en 24 horas, pero aún queda en la cabeza de la dirigencia ver para dónde encarar. No está muy clara la planificación que se piensa a mediano plazo. Todo está dominado por la política interna en la Asociación del Fútbol Argentino.
Parar el fútbol no es un paliativo piensan en la institución, pero tampoco se vislumbran acciones con cierta contundencia y “análisis”. Nadie puede cortar con el todo pasa.
Los partidos de la copa se juegan desde este miércoles ¿Cómo vuelve el fútbol?
Este miércoles habrá partidos de Copa Argentina. Y los juegos programados son: a las 15, Atlético de Rafaela-Flandria; a las 18, Crucero del Norte-Los Andes; a las 19, Lanús-Atlético Tucumán y a las 20 Boca-Huracán Las Heras.
También se jugará toda la fecha correspondiente al Torneo Federal A. Cabe recordar que el juego correspondiente a Talleres (visitaba a 9 de Julio en Morteros) fue postergado al miércoles 3.
Ya el viernes retomará la actividad a desarrollar este fin de semana en las dos categorías principales del fútbol argentino: Primera y Primera B Nacional.www.diaadia.com.ar
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