Las declaraciones dadas por José López el funcionario k ante el juez federal Daniel Rafecas que los más de US$9 millones que intentaba esconder "era plata de la política".
Además de considerar que esa afirmación le produce "mucha tristeza", José María Campagnoli recordó algunas de las trabas que sufrió mientras investigaba la corrupción durante el kirchnerismo.
"Cuando ubicamos a varios de los personajes de esta banda en un mismo viaje hacia Suiza o Estados Unidos, al poco tiempo de conocerse nuestra investigación, se nos cayó el sistema con el que accedíamos a la Dirección Nacional de Migraciones, la Inspección General de Justicia no nos respondió los oficios", afirmó en el programa de televisión El Juego Limpio (Todo Noticias).
El primer fiscal que investigó la ruta del dinero K reveló que junto a su equipo de trabajo habían detectado "una serie de llamadas" entre el contador de Lázaro Báez, Daniel Pérez Gadín, y un teléfono del Ministerio que encabezaba Julio De Vido.
"Cuando no nos quedó más remedio que hablar con Planificación Federal al otro día aparecieron abogados con escribanos de las partes para sacar copia de lo que teníamos. El poder del Estado era tal que pretendía anular a cualquier organismo que tuviera el poder de controlar. Vimos un montón de signos que hablaban de un 'cepo a la Justicia'", sostuvo.
Sobre su destitución y posterior restitución en el cargo, Campagnoli destacó el rol de "la gente que juntó firmas, que hizo marchas y del periodismo".
Sin el apoyo de esos tres sectores, el fiscal consideró que no habría podido volver a su cargo.
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