SOCIEDAD / POLICIALES
Tras haber atropellado y matado a la maestra Silvia Cabrera y causar lesiones en la amiga de ella, Rosa Pedercino, en Vicente López, el conductor del auto que protagonizó el fatal hecho asumió su responsabilidad, aunque se justificó al decir que se "asustó" porque pensaba que lo perseguían dos autos.
El implicado en el hecho, Tomás Nuñez Aboy, de 27 años, quien trabaja en una consultora de finanzas internacional y que manejaba ebrio a 140 km/h aseguró que no es cierto lo que dicen los medios y que no corría una picada sino que iba a alta velocidad porque escapaba de una persecución.
"Ante todo pido sinceramente perdón a las familias de las víctimas. No es mi intención eludir la responsabilidad que me corresponde en los hechos. La admito porque me considero responsable. Pero quiero dejar claro que no es cierto lo que se dice de mí en los medios", sostuvo el hombre a diario PERFIL.
"Yo no estaba corriendo una picada ni conducía a gran velocidad por ser un inconsciente o indiferente a la vida ajena. Lo que pasó fue que me asusté y por eso me escape de quienes me perseguían en dos autos. Esa persecución está reconocida por el propio fiscal y por el juez. Y por eso imputan a los que me perseguían. Esa es la verdad", afirmó.
Aboy dijo que está a disposición de la Justicia y prometió colaborar con la investigación y con las víctimas.
"Sé que esto no les sirve a las familias pero es todo lo que puedo hacer en este momento", concluyó.
Al momento del hecho, el principal acusado tenía 2,18 gramos de alcohol en sangre cuando lo máximo permitido es 0,5. (diariopopular.com)
No hay comentarios:
Publicar un comentario