DEPORTES / FÚTBOL
Desde las 15, el predio Julio Grondona de Ezeiza se nutrirá de dirigentes que intentarán dejar atrás dos años y medio de desorganización en el fútbol argentino.
El fútbol argentino tiene (o tenía) la oportunidad de comenzar una nueva era este viernes. O de demostrar que nunca es demasiado ridículo.
A un año y dos meses del fatídico 38-38 y a dos años y medio de la muerte de Julio Humberto Grondona, el día que empezó la debacle, una doble asamblea podría cambiar el rumbo y empezar a navegar en aguas calmas. Pero no será por completo, al menos hoy.
La cita es a las 15 en "el predio que la AFA posee en Ezeiza", nombre vulgar del, justamente, Julio Humberto Grondona.
De acuerdo al Boletín N°5288 del Comité Ejecutivo, hay dos Órdenes del día. La primera, para la Asamblea Ordinaria que tendrá como propósito la rescisión oficial del contrato con el estado por el programa Fútbol Para Todos.
Lo que quedará para otro día, vaya a saberse cuándo, es el otro punto: la aprobación del nuevo contrato de cesión de los derechos televisivos, nuevamente postergada pese a tener las tres ofertas sobre la mesa: ESPN, Fox o MediaPro.
Un pedido de parte de la Comisión audiovisual de retrasar los análisis derivó en que la aprobación o no también quede en pendientes. El problema es que, al no tratarse, podría correr serio riesgo el inicio del certamen en el primer fin de semana de marzo, ya que la pelota no rodará si el gobierno no desembolsa 350 millones de pesos.
Tras esto llegará lo que podría considerarse una guerra: los 72 asambleistas, convocados y aprobados por FIFA y CONMEBOL, pasarán a la Asamblea Extraordinaria que consistirá en la aprobación del nuevo Estatuto, confeccionado por los organismos mencionados, además de hacerlo lo propio con la Superliga.
Luego se aprobará el Código Electoral y el de Ética, para cerrar con la confirmación del cronograma electoral: a priori, el 16 de marzo es el día señalado.
Los nombres que se postularán, por ahora, son una incógnita aunque el de Chiqui Tapia parece picar en punta, acompañado por Daniel Angelici y Hugo Moyano.
Sin embargo, por fuera de lo anunciado podría llegar la bomba de la tarde: circula, cada vez con más fuerza, que Armando Pérez anunciará su renuncia a la presidencia del Comité de Regularización.
Después de un fin de año donde estuvo muy cerca de la muerte, todo indica que las presiones fueron demasiadas y el dirigente de Belgrano dejará, una vez más, vacante el sillón de don Julio.
Cada dirigente que se aproxime a Ezeiza pensará en no irse de la misma forma que aquel 3 de diciembre del 2015, con la cabeza gacha sabiendo del papelón que se había perpetrado. Una tarea que tan simple parecería pero que nadie se puede arriesgar a prometer. (www.goal.com)
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