(DIARIO POPULAR) - Similar a los crímenes del Clan Puccio, cuya historia de torturas y secuestros conmocionó a la Argentina durante la década de 1980, este lunes a la tarde (por ayer) se descubrió un caso similar en Bahía Blanca.
El denominado Clan Benítez, integrado por una mujer y sus dos hijos, secuestró, torturó y abusó sexualmente de dos mujeres jóvenes durante meses.
El aberrante hecho salió a luz cuando una de las víctimas logró escapar. Los integrantes del Clan Benítez son Fernando Rubén, de 26 años, apuntado como el principal actor del caso; Gonzalo Leonardo Benítez, de 24; y la madre de ambos, María Esther Llanos, de 65, quienes fueron detenidos en su casa de Güemes al 3700, del barrio Latino, de la ciudad del sur bonaerense.
El caso está calificado como privación ilegal de la libertad, tentativa de femicidio, reducción a la servidumbre, abuso sexual y comercialización de estupefacientes. Si bien trascendió que los hermanos Benítez realizaban tareas de albañilería, los investigadores tomaron declaraciones de vecinos que los señalan como vendedores de drogas al menudeo y los tildaron como “la manzana podrida del barrio”. Un vecino dijo que "una vez casi me incendian la casa" que mantuvo una discusión por los perros.
Fuentes policiales aseguraron que Fernando Benítez tenía antecedentes de violencia de género, ya que había sido denunciado por una joven y pesaba una restricción de acercamiento hacia ella que tenía como vencimiento junio del año próximo.
Por otro lado, el padre de la familia, Rubén Benítez, cumplió una condena de tres años con prisión en suspenso por herir con un cuchillo las piernas de la pareja adolescente de uno de sus hijos en 2013.
CÓMO SE DESCUBRIÓ
Las víctimas de la macabra familia son Aldana García, de 18 años, y Andrea Santa Cruz, de 23. Ambas presentan lesiones provocados por torturas y otras heridas provocadas por salvajes violaciones.
Días atrás, la familia de una de las víctimas había realizado una denuncia por averiguación de paradero, ya que no la podían encontrar y suponían que algo le podría haber pasado. Aldana García estaba en pareja con el mayor de los hermanos hace cuatro meses, quien los últimos días la habría mantenido secuestrada.
La madre de la víctima hizo la denuncia de lo que estaba ocurriendo, luego de que un familiar la viera deambulando en la vía pública, muy desorientada y toda golpeada, según publicó La brújula 24.
A Santa Cruz, en tanto, que sería pareja del otro de los Benítez, la halló la propia policía cuando fue a allanar la casa de calle Güemes. Según detallaron, estaba desvanecida dentro de la propiedad.
LAS DROGABAN CON COCAÍNA
Aldana García ingresó a la terapia intensiva del Hospital Penna con un derrame cerebral, golpes en todo el cuerpo y mordeduras de perro y humano. Estaba secuestrada desde hace cuatro meses, según confirmó el fiscal de la causa, Romero Jardín, a La Nueva.
La familia de García contó que Benítez la había conocido por Facebook y que era muy celoso. Fernando Benítez y ella tenían una relación por lo que la policía fue directamente a la casa de él. Allí hallaron a Andrea Santa Cruz en también en grave estado de salud. A ella la trasladaron al Hospital Municipal.
"No elimina los tóxicos del cuerpo, necesitamos recuperar la función de esos riñones. Vamos a evaluar si necesita diálisis", explicó la doctora Graciela González Prieto. El fiscal afirma que ella estuvo dos meses cautiva.
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