Por Agustín Monguillot (canchallena.com-Foto: Télam)
Para estos equipos las cosas son claras. Presupuesto bajo, pocas incorporaciones y arreglarse con lo que hay. Argentinos Juniors sabe bien cómo es este regreso a Primera. Y no hay que esperar lujos o juego vistoso.
Pero sí se puede construir, sin complejos, y desde una actitud ofensiva, un equipo que vaya moldeando su identidad y pueda ganar en solidez sin sentirse en inferioridad de condiciones. Ésa es la propuesta del Bicho.
Lleva ocho partidos sin perder con Néstor Gorosito, con los cinco que arrastraba desde la B Nacional y los tres que le sumó ahora en la era post Riquelme. No está nada mal.
Nadie esperaba que el conjunto de la Paternal comenzara el nuevo torneo de 30 equipos con 7 puntos sobre 9 posibles y todo parece ser gracias a esa forma de pensar.
El triunfo de ayer ante Defensa y Justicia fue una muestra de eso. En el 1-0 final no se refleja toda la superioridad que mostró en la cancha. ¿Cómo lo consigue? Aquí no hay fórmulas mágicas.
Gorosito propone una línea de tres defensores, más un mediocampo muy poblado. Desde allí, Cristian Ledesma se encarga controlar todo y generar el juego. Alrededor de él se despliega una tropa de voluntariosos jóvenes dispuestos a sacrificarse por el equipo.
Gaspar Iñíguez (20 años) lo acompaña en la elaboración. El colombiano Reinaldo Lenis (22) es incansable para ayudar por toda la banda, desde un área a la otra. No por eso deja de ser un peligro para la defensa rival. Lautaro Rinaldi (21) es un peleador infatigable, no da pelota por perdida y ya parece consolidado en el equipo.
Y está Federico Gallego (24), el que ayer, desde fuera del área, tomó un rebote tras un centro y de aire sacó un zurdazo para el 1-0. El uruguayo parece ser otro acierto de Gorosito. Sus orígenes en el ascenso en su país, con Sud América, abrían más incógnitas que certezas. Pero su crecimiento es notable y es otro de los que se animan a pensar que Argentinos no es un equipo inferior en la categoría.
Empezó con todo. Le ganó a Rafaela (2-0) y empató con Colón (1-1). Ayer terminó siendo completamente superior a Defensa.
Mereció ganar por algún gol más. Su mayor fortaleza parte desde la mente.
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