Florencio Randazzo.
"No vamos a indemnizar absolutamente a nadie". La frase que lanzó esta mañana el ministro de Interior y Transporte, Florencio Randazzo, mostró la intención del Gobierno en la estatización total de los trenes, uno de los anuncios que ayer hizo la presidenta Cristina Fernández ante el Congreso.
El ministro y precandidato presidencial por el kirchnerismo defendió el discurso de la jefa de Estado, aunque en efecto la Casa Rosada ya estatizó de hecho hace más de una década los trenes argentinos: desde 2003, todo lo que pasa en las vías argentinas se hace con la venia o la orden oficial y se congeló la tarifa hasta hacer el sistema dependiente del subsidio y ya se rescindieron concesiones que estaban en manos de privados.
Sólo hay una novedad en el anuncio de la Presidenta: volverá a existir Ferrocarriles Argentinos, si el Congreso aprueba el proyecto que envía el Ejecutivo.
"El Estado ya no le paga más a los privados. Tenemos motivos para rescindir el contrato. El Estado está en condiciones de ser más eficiente que los privados porque lo ha demostrado. No vamos a indemnizar absolutamente a nadie porque no corresponde", afirmó Randazzo en diálogo con radio 'La Red'.
El Congreso podrá resucitar Ferrocarriles Argentinos. La firma sería la responsable de toda la operación y la infraestructura ferroviaria del país. Será la consagración de un viejo proyecto del ministro Florencio Randazzo. Y será una enorme limitación para la próxima gestión, que deberá acomodar la política sectorial a lo que apruebe un Congreso que funciona sin escuchar demasiado a la oposición. O en su caso soportar el costo político de volver a enterrar un símbolo de la Argentina.
Apenas un día después del discurso de Cristina, en el 'Boletín Oficial' de hoy ya se publicó la resolución 171/2015 que, en los papeles, "instruye a la sociedad Operadora Ferroviaria Sociedad del Estado para que instrumente las medidas necesarias a los efectos de rescindir los Acuerdos de Operación".
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