Desde que asumió su cargo de secretario de Seguridad porteño, Marcelo D'Alessandro controla las subsecretarías de Seguridad Ciudadana, Operaciones, Prevención del Delito, Relaciones con la Comunidad y de Emergencias y cuenta con un jugoso presupuesto para lograr la ambiciosa unificación.
Es el responsable junto a Ocampo, nada menos que de administrar parte de los más de $ 17.000 millones que la Nación giró a la Ciudad en concepto de coparticipación extra para el traspaso de las policías.
D'Alessandro, quien es abogado, fue seleccionado por sus antecedentes laborales en la Dirección General de Administración de Infracciones (DGAI) del Gobierno porteño.
Es "ahijado del corazón" de la jueza federal María Romilda Servini de Cubría y desde la DGAI supo construir lazos con funcionarios judiciales bajo el amparo de Daniel "Tano" Angelici, tildado por muchos como operador del PRO en los tribunales porteños, según indica el matutino Ámbito Financiero.
El funcionario del PRO llegó a la cartera de Seguridad desde el Frente Renovador, sumándose a otros referentes del massismo como Adrián Pérez, que asumió un cargo en el Ministerio del Interior como secretario de Asuntos Políticos, o el economista Ricardo Delgado, en la subsecretaria de Obra Pública de la Nación.
En tanto, entre los nombres que baraja el Jefe de Gobierno también estaría el de Guillermo Calviño, a cargo de la superintendencia de Seguridad Metropolitana (la Policía Federal traspasada), pero para esto, debería perder rango policial.
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