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| Puente en la ciudad Chishi, en la provincia de Henan, en el centro-este del país |
Los puentes son una solución para pasar cualquier inconveniente y estorbo que encuentre a su paso, ya sea un río, un valle, una ruta, un camino o lo que sea. China a lo largo de los últimos años construyó una gran cantidad y tomó otras medidas para hacer frente a este problema, propio de las grandes ciudades del mundo.
El más reciente que construyó fue en la ciudad Chishi, en la provincia de Henan, en el centro-este del país. Se encuentra a 270 metros de altura por encima de la ciudad y tiene 1.500 metros de largo. Es sostenido por cables que unen la vía por donde se trasladan los autos con 3 estructuras de hormigón que están a 380 metros de altura.
El puente tardó 6 años en construirse y sólo las torres a las que van unidos los cables tardaron 2 años y medio. El costo total del puente: 1.300 millones de yuanes, el equivalente a US$ 191,99 millones.
Un ejemplo del tránsito que padece China fue cuando, en octubre de 2015, se produjo el peor embotellamiento en la historia en una autopista. Fue en la que une Macao –en la costa sur de China− y Pekín –capital del país− donde había 50 carriles tapados, ¡tapadísimos!, de autos.
Igualmente, esto se trató de algo excepcional, cuando miles y miles de autos querían volver a sus casas después de 1 semana de vacaciones que tienen los chinos por el Día Nacional.
Pero Shanghai , la ciudad más poblada de China con más de 20 millones de habitantes, tampoco se salva del tránsito, además de que las multas ya son algo común en esta ciudad de China del Este. Shanghai tiene más de 3 millones de autos matriculados lo que muestra la causa de los embotellamientos.
Otra medida que tomaron los chinos para hacerle frente al tránsito fue la construcción de un colectivo que se traslada por encima de los autos. Raro pero muy efectivo por lo que se sabe. El colectivo fue presentado en la Exposición de Alta Tecnología de Beijing en mayo de 2016 y puesto en funcionamiento a prueba en agosto del mismo año.
En forma de túnel, permite que los autos pasen por abajo y así no generar más problemas de tránsito. El TEB-1, por sus siglas en inglés de Autobús Elevado de Tránsito, tiene 22 metros de largo, 4,8 de alto, 7,8 de ancho y una capacidad para 300 pasajeros.
Todas estas características permiten que los autos puedan circular por 2 carriles dife rentes y todo abajo del colectivo. Si bien todavía no se lo puede ver circular por las calles del país oriental debido a que le falta mejorar algunos aspectos, representa una gran solución y es muy probable que en los próximos años ya esté en funcionamiento.
Y en la Ciudad de Buenos Aires (Argentina) tampoco ya nadie se sorprende del tránsito que miles de autos tienen que enfrentar todos los días, en especial a la mañana cuando las personas van a sus lugares de trabajo y a la tarde, otra hora pico, cuando vuelven a sus casas.
Según publicó diario Clarín, en febrero de 2014, en los últimos 15 años se duplicó la cantidad de autos que entran a la ciudad por día, hoy alrededor de 1 millón. Son muchos los que eligieron mudarse a las afueras en busca de más tranquilidad pero no se salvan del todo.
Todas las mañanas vuelven para trabajar y también, disputarse un lugar en las calles para poder circular. Dependiendo del día, será posible o no.
Según se cita en la nota, Vialidad Nacional calcula que la cantidad de autos que llegan a la Ciudad por día pasó de 650.000 a 1.316.000 entre 1998 y 2013.
También se cita a Ernesto Arriaga, un especialista y conocedor del tránsito en Argentina. “Hace diez años entraban 800.000 vehículos por día y se patentaban 600.000 por año. Ahora hay casi un millón de patentamientos anuales y en el último año salieron 616.000 motos a la calle. Mientras, en los últimos diez años el parque automotor de Capital pasó de 600.000 a un millón de vehículos, de los cuales circulan 600.000”, dijo Arriaga.
Un colectivo como el Chino o uno de esos puentes tan largos que construyen no vendrían nada mal de este lado del mundo.
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