UNIÓN-INDEPENDIENTE: EL ROJO PERDIÓ Y NO PODRÁ ACCEDER DIRECTAMENTE A LA COPA LIBERTADORES 2019

FÚTBOL / SUPERLIGA 

Foto: Télam

Por José E. BORDÓN / LA NACIÓN 

SANTA FE.- Independiente quedó frustrado y vacío de un objetivo que tenía a mano: con la derrota ante Unión por 1 a 0, desaprovechó la oportunidad de clasificarse directamente para la Copa Libertadores 2019. 


El Rojo (6° en la Superliga) acumula 46 puntos y tiene una diferencia de +10, mientras que Talleres, que ocupa el 5° lugar en el torneo y empató hoy 2-2 con Olimpo, posee la misma cantidad de unidades pero cuenta con +13.

 Así las cosas, Independiente solo podrá acceder a la Libertadores 2019 si gana la vigente Copa Libertadores o si se consagra en la Copa Argentina. Eso sí: se aseguró un cupo en la Copa Sudamericana. Mientras tanto, Talleres tendrá los ojos puestos en Racing, 45 unidades y una diferencia de +16.

El lunes, a la Academia le bastará con un empate ante Colón para llegar a la Libertadores. Al margen de esa lucha, Unión ya festeja su llegada a la Copa Sudamericana: con 43 puntos, se aseguró el pasaje luego de la derrota de Belgrano -su principal perseguidor en esta lucha- ante Temperley.

Lo cierto es que Unión jugará por primera vez una copa internacional. Por eso, la fiesta tatengue comenzó en el estadio y sigue esta noche por gran parte de la ciudad.

Nunca estuvo en duda la victoria del conjunto santafecino. Presionó en todas las líneas, le quitó la pelota a su adversario y desde que se colocó en ventaja, se sintió más dominador que antes.

En otras palabras: supo lo que debía hacer para conseguir el resultado que buscó desde el comienzo. En casi gran parte del cotejo el tatengue lo incomodó al visitante. Independiente intentó, por afuera y por adentro, pero no tuvo peso ofensivo.

Y en el medio, pocos pasajes de Rodríguez y Meza, y arriba, sólo las buenas intenciones -y pocas concreciones- de Benítez y Romero no alcanzaron para lastimar a una defensa sólida, atenta y expeditiva, con un gran trabajo de Blasi y de Gómez Andrade.

La ventaja desde el arranque del complemento facilitó mucho el trabajo del ganador. Unión se acomodó, esperó sin perder el orden y cuando pasó la línea de volantes se insinuó contundente. Independiente sintió el golpe pero en lugar de reaccionar, se obnubiló.

Cuando quiso reaccionar no pudo y ni siquiera las modificaciones que introdujo Holan cambiaron ese rostro malhumorado que tuvo el visitante. Unión terminó invicto como local. Ese fue el respaldo para aproximarse al objetivo. Faltan otros resultados, pero ya comenzaron los festejos. Independiente, en cambio, necesita replantearse muchas cosas.