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| Bullrich, junto a Pullaro. |
2 veces en menos de 24 horas. La frecuencia de los ataques mafiosos en Rosario es cada vez mayor. Tras la balacera al edificio del Concejo Municipal, ayer a la madrugada fueron atacadas a tiros las inmediaciones del Ministerio Público de la Acusación (MPA). Así, crece la preocupación entre jueces y fiscales.
El hecho ocurrió a las 00.40 del jueves, en la sede de la Fiscalía rosarina, en lo que fue el segundo ataque que la sede judicial sufrió en los últimos cuatro meses. El anterior episodio se había registrado en agosto. Los impactos de bala quedaron marcados en el frente de una obra en construcción lindera al edificio del MPA, en la vidriera de una peluquería en la misma cuadra y en el frente de un edificio antiguo, también en la misma calle.
"Nuevamente se repite una mecánica que está sufriendo la Fiscalía en estos momentos. Toda la información que hay es preliminar", afirmó Sebastián Carranza, jefe de prensa de la Fiscalía, ante diversos medios de prensa.
"Aproximadamente a las 00.40 de la noche de anoche, dos personas a bordo de una motocicleta han pasado por calle Montevideo y realizaron al menos 7 disparos de armas de fuego. Ningún proyectil impactó contra la Fiscalía pero se lo toma como un hecho contra este edificio", agregó.
El supuesto ataque a la Fiscalía ocurrió menos de 24 horas después de que el Concejo Municipal rosarino fuera el escenario de un preocupante atentado con sello mafioso. Durante el miércoles, el edificio público recibió al menos 12 impactos de proyectiles en su entrada y en una de las veredas del lugar apareció un cartel con el mensaje: "Con la mafia no se jode. La próxima, a sus casas".
"Todas las hipótesis investigativas están abiertas", referenciaron en rueda de prensa los fiscales de la Unidad de Gravedad Institucional Matías Edery, Miguel Moreno y Aníbal Vescovo al hablar de los últimos ataques mafiosos contra el Concejo Municipal y la sede local de Fiscalía.
Por su parte, el Ministerio de Justicia y Derechos Humanos de la provincia emitió un decreto ofertando una recompensa de 2 millones de pesos para quien aporte "datos útiles, relevantes y decisivos al esclarecimiento de los atentados perpetrados contra edificios públicos" de Rosario.
En agosto pasado, tras el ataque a la Fiscalía Regional, el mismo ministerio había lanzado un decreto similar para recolectar información. Y horas después, el ministro de Seguridad de la provincia, Maximiliano Pullaro, ordenó el relevo de toda la cúpula de la Policía de Rosario y de la conducción de la Policía de Investigaciones.
El ataque ocurrido ayer a la 0.40 contra la sede de la Fiscalía Regional fue igual a la mayoría de los atentados contra bienes que pertenecieron a investigadores y jueces que llevaron a la cárcel a la banda de Los Monos, e instituciones públicas como el Centro de Justicia Penal (CJP), los Tribunales provinciales, la Fiscalía y el Concejo. Una moto con dos ocupantes pasó por el frente y, sin detenerse, el acompañante abrió fuego indiscriminadamente.
Como en el ataque del miércoles a la madrugada al Palacio Vasallo, los tiradores dispararon a una altura menor al metro, pero no dejaron ningún cartel reivindicatorio del atentado. Dentro de la Regional había un policía de consigna, que fue quien dio aviso de la agresión. Y en las inmediaciones de los Tribunales y la Fiscalía, dos lugares que ya habían sido atacados a balazos, no había un móvil de custodia.
El fiscal Moreno indicó: "La realidad indica que hay una superabundancia de grupos que actúan con este modus operandi de dos personas en motos disparando contra grupos de personas, edificios públicos o casas particulares y que, a partir de esta proliferación de mano de obra delictiva, hay mucha gente dispuesta a aprovecharla".
Otro dato que suministraron los fiscales fue que la grafía de los carteles —de la saga "con la mafia no se jode"— no son peritables. "Se pueden establecer patrones de similitud, pero no son peritables en términos caligráficos. No son escrituras. Son dibujos de letras. No obstante eso, las líneas de investigación que llevamos adelante son las que conocen y que tuvieron como desenlace las imputaciones de octubre y otras que se mantienen en reserva", explicó por su parte el fiscal Edery.
Como ya había sucedido con la balacera contra el Concejo, el golpe contra Fiscalía motivó que la pata política local y nacional marcara una clara posición de repudio.
La ministra de Seguridad de la Nación, Patricia Bullrich, y su par santafesino, Pullaro, fustigaron los ataques. Por ahora, los pesquisas no descartan ninguna hipótesis. En 2018 ya se registraron unos 18 ataques a funcionarios y edificios judiciales de la ciudad de Rosario. Incluso, hace menos de 10 días fue baleado el edificio donde funcionan el Centro de Justicia Penal y los Tribunales provinciales.
En aquella ocasión, el atentado se produjo apenas cuatro días después de que se condenara a los líderes de la organización criminal Los Monos en la causa "Los Patrones".
Como si fuera poco, en ese ataque también se dejó un mensaje mafioso, con la particularidad de que fue firmado: "Con la mafia no se jode. Atte, Esteban Alvarado".
Esteban Lindor Alvarado es investigado por la Justicia rosarina por posibles vínculos con el narcotráfico. Actualmente está prófugo y con pedido de captura nacional e internacional como partícipe del homicidio del prestamista Lucio Maldonado ocurrido el 13 de noviembre pasado.
En las ropas de la víctima, que apareció baleada y maniatada, estaba el mismo mensaje de esta madrugada. Alvarado tiene investigaciones abiertas por narcotráfico y posee una condena como jefe de una organización ilícita a siete años de prisión por robo de autos de alta gama en el conurbano norte bonaerense, que cumplió a medias.
El presidente expresó también su repudio a través de las redes sociales:
Quiero expresar todo mi repudio frente a los ataques al Concejo Municipal de Rosario y al Ministerio Público de la Acusación. Los rosarinos cuentan conmigo para llegar hasta el fondo de lo que pasó y para enfrentar a estas mafias.
— Mauricio Macri (@mauriciomacri) 20 de diciembre de 2018
"Vamos a proponer una nueva forma de encarar esto, la tenemos que discutir con (Maximiliano) Pullaro", adelantó en un reportaje con 'LT8', la ministra de Seguridad de la Nación, Patricia Bullrich
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