AGENCIA / ECONOMÍA
La parálisis industrial que viene sacudiendo al país trae aparejado un agotamiento muy grande en la mayoría de las ramas industriales, lo que ha llevado a que los despidos y las suspensiones de personal sean una constante en diversos puntos del país.
Esto puede verse con la decisión del Grupo Techint, que dirige Paolo Rocca, de suspender a más de 3.300 empleados en su empresa Siderca ubicada en la localidad bonaerense de Campana.
Desde la firma aducen que la medida se debe más que nada a la caída en el precio internacional del petróleo, que paralizó la demanda de tubos sin costura que fabrica la empresa, cuyos principales clientes están en Estados Unidos y Canadá.
Según trascendió desde adentro de la propia empresa, hoy día la planta en Campana está funcionando sólo al 30% de su producción, uno de los más bajos de la historia, sin que hasta el momento las autoridades nacionales se hayan percatado de la enorme crisis que atraviesa el sector.
En la empresa son reacios a cualquier acuerdo entre la Argentina y China, ya que culpan a ese país de vender tubos a precio de "dumping” (menor importe del que debería, con tal de ganar participación de mercado).
La planta de Campana exporta el 70% de lo que produce, y hasta que no repunte el precio del petróleo será difícil que el negocio vuelva a ser redituable para la empresa, por lo que se teme que los despidos y suspensiones aumenten en vez de amilanar.
No hay comentarios:
Publicar un comentario