Los residentes de la frontera entre Colombia y Venezuela deberán portar una cédula de identidad especial, como parte de las medidas para la reapertura de ese territorio que será decidida próximamente por los presidentes de ambos países.
La creación del documento fue acordada este jueves por las cancilleres de Venezuela, Delcy Rodríguez, y de Colombia, María Ángela Holguín, tras una reunión de cinco horas en la sede del ministerio de Relaciones Exteriores en Caracas.
"Colombia hizo una propuesta que fue aprobada, que es la creación de la cédula fronteriza para los ciudadanos venezolanos y colombianos de la frontera, donde va a estar contenida la información fundamental de las actividades que se desarrollan en la zona", declaró Rodríguez tras el encuentro.
La canciller venezolana consideró que el documento hará más rigurosos los controles de seguridad, en el marco de la lucha binacional contra el contrabando de gasolina, el narcotráfico y el crimen organizado.
"La propuesta de la cédula va a ser muy útil", señaló por su parte Holguín, confiando en que los acuerdos alcanzados por ambos gobiernos en varios ámbitos contribuirán a una "apertura segura de la frontera".
De 2.219 kiñómetros, el territorio limítrofe se encuentra cerrado desde el 19 de agosto de 2015 por orden del presidente venezolano, Nicolás Maduro, quien tomó la medida en respuesta a un ataque armado contra una patrulla militar de su país que atribuyó a paramilitares colombianos.
Las ministras, que se reunieron con Maduro señalaron que la reapertura será decidida por éste y su homólogo colombiano, Juan Manuel Santos, en una cita cuya fecha y lugar serán anunciados en los próximos días.
"Vamos a hacer una apertura paulatina de la frontera, los presidentes tomarán la decisión una vez se reúnan", afirmó Holguín en los jardines de la Casa Amarilla, sede de la cancillería venezolana. Rodríguez indicó que las acciones acordadas preliminarmente, como la cédula y la instalación de gasolineras venezolanas en el lado colombiano, irán "creando el ambiente para una apertura gradual".
Sobre los expendios de combustible, la diplomática explicó que fue un planteamiento de Caracas y consiste en vender la nafta venezolana -la más barata del mundo- en pesos colombianos.
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