POLÍTICA / ADVERTENCIA
(U24) - "El panorama viene muy feo y en estos días se va a profundizar", disparó Juan Grabois en declaraciones al canal América 24 ayer (21/12). El amigo del papa Francisco –que lo nombró consultor del Pontificio Consejo de la Justicia y de la Paz-es también dirigente de la Confederación de Trabajadores de la Economía Popular que suele movilizarse para lograr fondos del Gobierno como ocurrió con la emergencia alimentaria.
Ahora, con motivo de los incidentes en el Congreso de la Nación por la reforma previsional, los cacerolazos y algunos saqueos como los ocurridos ayer en Luján, Grabois anticipa que la situación será peor en los próximos días, aunque no dijo si contaba con información de lo que afirmaba.
Acerca de los incidentes del lunes (1 8/12) en el Congreso, Grabois reconoció que “la lluvia de piedras fue impresionante. Hubo activistas que hacen militancia política y con los cuales no estoy de acuerdo y hubo gente que se prendió porque lastiman y se dejan lastimar".
Pero aclaró enseguida que la violencia "no fue organizada, fue una minoría ínfima".
"El que lo hizo fue muy estúpido y fue funcional al Gobierno. Fue más violencia política que violencia social", agregó.
"Vimos la externalización que se genera en la barriadas por la exclusión social que se manifiesta de distintas maneras combinada con la pérdida de autoridad del sistema político", reflexionó.
Y argumentó: "La violencia es por la frustración y la bronca de fines de año porque es allí donde se exacerba el consumo y los que están fuera de ello, tienen bronca".
Juan es hijo del mítico dirigente peronista Roberto “Pajarito” Grabois, el fundador del Movimiento de Trabajadores Excluidos.
Luego, culpó al Gobierno nacional por una aparente falta de diálogo después de las elecciones legislativas: "Creo que por soberbia no se invitó a las organizaciones a las reuniones en el CCK. El diálogo con el Gobierno se cortó. Estamos en una situación de emergencia".
"Pensaron que como en dos años no habían tenido quilombos no necesitaban hablar más con esta gente. No había un compromiso de trabajar políticas públicas y por otro lado hay una pretensión de hacer caja con los fondos que van a los más vulnerables", añadió.
Grabois es un abogado católico principal impulsor de la Confederación de Trabajadores de la Economía Popular y tiene trato directo con el Papa Francisco, casi familiar tanto que el Sumo Pontífice lo nombró consultor del Pontificio Consejo de la Justicia y de la Paz.
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