(DP) - Se vienen una serie de aumentos de esos que golpearán duramente en los bolsillos, que ya vienen afectados por los incrementos anteriores en las tarifas de los servicios públicos y la clara incidencia de la inflación, que erosiona los ingresos de asalariados o trabajadores independientes.
El fin de año aparece en el horizonte como difícil de afrontar, a partir del cronograma ya anunciado de subas del gas, los colectivos, prepagas, los combustibles y el arrastre a los precios de alimentos y otros elementos de consumo básico.
En el mes de octubre que se inicia, por el mecanismo de Revisión Tarifaria Integral (RTI) del gas está previsto una actualización del cuadro tarifario y en las boletas que le llegarán a los usuarios se verificarán aumentos que van de un 30 a un 35 por ciento.
Recién para 2019, empezaría a regir un esquema de “tarifa previsible”, que apuntaría a nivelar el monto de cada factura bimestral.
Para el transporte colectivo de pasajeros en el área metropolitana se implementará la tercera etapa de los aumentos y el boleto mínimo costará 13 pesos, al margen del incremento de las segundas y terceras secciones o bien el descuento sí se viaja en el término de las dos horas.
Cabe recordar que en agosto estaba a 11 pesos y en septiembre se fue a 12, en medio de escasos aumentos en los ingresos de bolsillo de la gente.
También se estima que los combustibles tendrán un “retoque”, como los que se experimentaron en los últimos meses, con ajustes pequeños, pero que generan una importante variación en el valor del litro de nafta o gasoil (ver nota).
El precio del dólar en el mercado cambiario, lo que sucede con el petróleo y los biocombustibles a nivel internacional se tienen en cuenta para esos aumentos tan temidos por automovilistas y el transporte en general.
En tanto, el Gobierno autorizó un aumento del 8% de las prepagas para mañana (ya suman casi 30% en el año).Y sin “descanso”, para noviembre se anuncia la suba del subte, impulsada por el gobierno de la ciudad de Buenos Aires y será progresivo, a un pesos por mes hasta llegar a los 16,50.
Si bien se tiene que pasar por el proceso de la audiencia pública por aplicación de la “tarifa técnica”, su actualización demandaría un pasaje a 19,20 pesos para fines de este año.
Y finalmente, para el mes de diciembre, se aguarda que los combustibles vuelvan a aumentar, debido a la actualización impositiva, que se desprende de la variación del Índice de Precios al Consumidor, correspondiente al último trimestre.
Además, podrían sumarse otros aumentos, pese a que se anunció que el acuerdo político con los gobernadores derivaría en que las tarifas de AYSA, de Edenor y Edesur, y del transporte de pasajeros interurbano metropolitano pasen al control de la Ciudad y de la Provincia.
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