Kim Jong-un / foto ANSA |
(ANSA) - PEKIN, 26 JUL - El lanzamiento de dos misiles balísticos de corto alcance desde Corea del Norte hacia el Mar de Japón fue "una demostración de poder y una solemne advertencia a los militares belicistas" del Sur.
Así fue presentada hoy esa prueba por la agencia de prensa oficial de Pyongyang, según la cual el gran líder Kim Jong-un "organizó personalmente" el provocativo test de lo que él definió "el estado del arte de este sistema de armas".
"No podemos hacer otra cosa que desarrollar sin descanso potentes sistemas de armamento para eliminar las potenciales y directas amenazas a nuestro país que existen en el Sur", afirmó Kim, probablemente en referencia a las maniobras militares que Seúl se apresta a desarrollar junto a Estados Unidos y, especialmente, a la compra de los nuevos poderosos aviones caza.
De hecho, hace algunos días Corea del Sur informó que dos aviones caza stealth F-35A llegaron al país desde Estados Unidos, y se agregan a otros dos recibidos con anterioridad. Seúl prevé, además, adquirir otros 40 para 2021.
Según las primeras indicaciones de medios norcoreanos, los misiles probados el jueves serían parte de "un nuevo sistema de armas guiado", que puede volar a baja altitud, a unos 40 kilómetros, y por lo tanto son muy difíciles de interceptar. Fuentes militares surcoreanas y estadounidenses afirman que notaron en los misiles norcoreanos varias similitudes con los misiles balísticos rusos Iskander, vectores de corto alcance capacitados para transportar cabezas nucleares.
Pero más allá de la "solemne advertencia" a Seúl, el lanzamiento podría significar un nuevo revés en las ya complicadas negociaciones para la desnuclearización de la península coreana. O, por el contrario, una toma de posición de cara a una nueva ronda.
Cuando a fines de junio pasado, el presidente estadounidense Donald Trump le volvió a estrechar la mano a Kim en un encuentro sin precedentes, en la zona desmilitarizada en el confín entre ambas Coreas, se estableció la reanudación de las negociaciones, aunque todavía no se estableció una nueva fecha.
El secretario de Estado estadounidense, Mike Pompeo, afirmó el jueves en diálogo con Bloomberg que los coloquios podrían iniciar en el curso de pocas semanas. Y, al mismo tiempo, le restó importancia al alcance de la prueba nuclear al darle solo un valor de "negociación táctica". "Todos intentan prepararse para las negociaciones creando riesgos para la otra parte", aseveró.
Es evidente que Washington pretende seguir adelante a pesar de todo. No por casualidad, Trump le restó importancia a lo sucedido. En una entrevista con Fox News afirmó que los norcoreanos "realmente no probaron más que pequeños misiles, algo que muchos hacen". (ANSA).
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