CIUDAD DE BUENOS AIRES (Urgente24).- Tanto Mauricio Macri como Daniel Scioli, de asumir la presidencia el 10 de diciembre próximo deberán hacerse cargo de los salarios de los cientos de empleados públicos que agregó al Estado nacional la presidenta Cristina Fernández en los últimos meses de su mandato, además de lidiar con ellos en lo político por tratarse en muchos casos de militantes del cristinismo.
Pero eso no será todo. La presidenta dejará ‘activados’ unos 8.800 concursos para ocupar puestos de planta permanente en distintas dependencias de la administración pública que deberán ser resueltos por la próxima administración.
En los últimos seis años, el gobierno convocó a más de 11.000 concursos entre empleados públicos para ocupar nuevos cargos en planta permanente en ministerios y organismos del Estado.
De ese total, 2200 agentes ya fueron asignados y quedan casi 8800 concursos pendientes para que resuelva la administración que asumirá el poder el 10 de diciembre próximo, indica este jueves (19/11) el diario La Nación.
Mauricio Macri ya adelantó en varias oportunidades durante la campaña que revisará cada designación de las realizadas por Cristina en el último tiempo, y lo mismo hará en este caso, según confirmaron desde su equipo.
En el caso de Scioli no hubo definiciones claras pero no objetaría los nombramientos ni los concursos abiertos. Según datos de fuentes de recursos humanos de la Casa Rosada, entre el 1° de enero de 2009 y el 31 de diciembre de 2014, se realizaron más de 4000 convocatorias a concursos dentro del Poder Ejecutivo y de sus ministerios.
Sólo en todo 2015 se agregaron 7000 concursos. La cifra total fue de más de 11.000 cargos para planta permanente, precisó el matutino.
De todas esas competencias abiertas, se designó a 2200 agentes con estabilidad definitiva. Son los que concursaron en los primeros años desde 2009. Por ese motivo, unos 8800 concursos están aún en marcha y en diversas etapas de avance por definirse bajo el eventual gobierno de Scioli o el de Macri.
Esos concursos abiertos involucran a empleados de la presidencia de la Nación y de todos los ministerios. Pero se concentran en la Cancillería y los ministerios de Trabajo, Economía, Desarrollo Social, Salud, Justicia y Cultura, prosiguió La Nación.
La cuestión de los nombramientos de empleados públicos en las administraciones salientes es un tema político muy sensible. El caso emblemático que el del municipio de Concepción, en la provincia de Tucumán, donde el jefe comunal electo, Roberto Sánchez (Cambiemos) no quiso convalidar los cientos de nombramientos en planta que firmó en los últimos días de mandato el saliente jefe comunal y fue sitiado en el edificio de la Intendencia por los empleados durante varias horas el 9 de noviembre pasado, en un piquete organizado por punteros kirchneristas instigados por su antecesor, Osvaldo Morelli.
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