Siguen los descubrimientos de los gastos fastuosos de la era K. Uno de los más escandalosos involucra a Enarsa, la fracasada petrolera que inventó Néstor Kirchner y que terminó como importadora de energía con un déficit monumental.
Pero eso no le impidió conseguir fastuosas oficinas en la Avenida Libertador por las que se pagan US$ 31 el metro cuadrado.
Hugo Balboa es quien está ahora como presidente de Enarsa, por pedido del ministro de Energía, Juan José Aranguren.
Apenas llegó al cargo y a su despacho destinado en el edificio de Avenida del Libertador al 1068, donde también funciona la sala en la que se hacen las reuniones de directorio, se sorprendió por la fastuosidad del lugar a pesar de que Enarsa es la segunda entre las mayores beneficiadas con los subsidios oficiales, detrás de Cammesa, la compañía que administra el mercado eléctrico.
Según la información que descubrió Balboa, Enarsa sólo es dueña del segundo piso del edifico de Libertador, menos lujoso, pero tiene otros tres pisos en esa torre, ubicada en Recoleta, indica este jueves (2/6) el diario La Nación.
La compañía paga por el lugar donde se hace el directorio US$ 31 por metro cuadrado. La suma está por encima del alquiler promedio de las locaciones de oficinas más importantes de la ciudad de Buenos Aires.
Como referencia, la zona de Catalinas, la más cara, costó US$ 28,2. De manera que las oficinas de la empresa estatal de energía le cuestan al Estado casi 10% más en dólares que el precio promedio más alto de la ciudad.
"Estudiamos una mudanza, pero los costos son también altos. Ahora tenemos dos alternativas: renegociar o irnos", dijo el titular de la empresa.
Su objetivo es bajar US$ 4 el precio del metro cuadrado en el edificio de Libertador, cuyos contratos (la empresa le alquila a varios dueños) vencen este mes.
No hay comentarios:
Publicar un comentario