(TN) - La Justicia dispuso la liberación bajo caución real de Florencia Bergamini, la mujer que estafó a varias personas haciéndose pasar como la jefa de prensa de la primera dama Juliana Awada, esposa del presidente Mauricio Macri.
La mujer acusada deberá reunir $ 500 mil para ser excarcelada, días después de ser detenida bajo los delitos de estafa y usurpación de título. La medida la ordenó el juez federal Rodolfo Canicoba Corral, en línea con la decisión del fiscal federal Franco Picardi, que había recomendado la liberación de Bergamini al recordar que los delitos por los que se la acusa son excarcelables, que la acusada no tiene antecedentes y que tiene domicilio constituido.
Bergamini estafó a varias mujeres: las contactaba a través de su marido, decía que tenía relación directa con la Primera Dama y les pedía a plata a cambio de una serie de beneficios a los que las víctimas jamás accedieron.
Delante de ellas averiguaba presupuestos de caterings que decía que eran para Awada y hasta organizó reuniones en el Palacio Duhau y en el Hotel Faena, todas maniobras de simulación. Entre sus engaños están la venta de paquetes baratos al Mundial de Rusia, y hasta llegó a ofrecer la oportunidad de compartir el viaje con Macri, maniobra con la que recaudó $ 150 mil.
Además estafó por $ 400 mil por supuestos descuentos en la reconocida marca de ropa Jazmín Chebar. A sus víctimas les decía que se les aplicaría en la tarjeta de crédito, lo que jamás ocurrió.
En su breve exposición ante la Justicia, Bergamini negó que conociera a Awada y dijo que si debe pedirle perdón a la Primera Dama lo hará, porque, aseguró, no tuvo intenciones de perjudicarla.
También indicó que devolvió todo el dinero a las mujeres que la denunciaron y dijo que no buscó estafar a nadie y pidió su excarcelación, que finalmente le fue concedida bajo caución real de $ 500 mil.
La "estafadora VIP" tiene 39 años y trabajaba como recepcionista en una empresa. Fue denunciada el 12 de marzo pasado de haber defraudado a tres mujeres a las que les aseguró que había conseguido pasajes pagados por Presidencia para viajar a Rusia para ver el Mundial.
Las damnificadas empezaron a sospechar cuando le pidieron un comprobante que acreditara sus viajes y ella solo les entregó un pedido de presupuesto de una reconocida casa de venta de artículos electrónicos.
A partir de la denuncia la Policía Federal realizó tareas de inteligencia que determinaron que trabajaba como recepcionista en una empresa constructora ubicada en Retiro, cerca de la Plaza San Martín, donde la arrestaron.
La clave para avanzar en su detención fue una escucha en su teléfono, una interceptación a una llamada que le hizo a su novio.
"¿Y? ¿Conseguiste la plata? Porque la tenemos que devolver... Vos me metiste en esto", le recrimina la acusada a su pareja, en la conversación.
Bergamini se presentaba en su cuenta de la red social Linkedin se presentaba como "Profesional, licenciada en comunicación con experiencia en medios de comunicación, y en otras áreas tales como relaciones públicas, atención al cliente, secretariado de gerencia bilingüe, recursos humanos y ventas".
No fue difícil ubicarla, ya que usaba cuentas bancarias y un celular a su nombre.
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