GLOBAL / VATICANO
"Hay que rezar siempre", recordó el pontífice, no sólo cuando se siente la necesidad, porque "sin la plegaria la fe vacila".
En su prédica, analizó varios pasajes bíblicos vinculados a la oración y comentó sobre la plegaria llena de "angustia" de Jesús en Getsemaní: "el objeto de la plegaria pasa a segundo plano y lo que importa antes que nada es la relación con el Padre. Eso hace la plegaria, transforma el deseo y lo modela según la voluntad de Dios".
Al término de la audiencia general, recordó que hoy es la Jornada Internacional de los Niños Desaparecidos.
"Es un deber de todos proteger a los niños, sobre todo los expuestos a un elevado riesgo de explotación, trata y conductas desviadas.
Auspicio que las autoridades civiles y religiosas puedan sacudir y sensibilizar las conciencias, para evitar la indiferencia frente al malestar de niños solos, explotados y alejados de sus familias".
No hay comentarios:
Publicar un comentario