Por ARMANDO ROCHA / U24 En el encuentro que se disputó en el estadio Arena Do Gremio, Lanús cayó este miércoles (22/11) 1-0 ante Gremio de Porto Alegre por el partido de ida que correspondió a la final de la Copa Libertadores de América 2017.
En la etapa inicial, el equipo ‘Granate’ estuvo mejor parado dentro del campo de juego e hizo méritos suficientes para poder llevarse la victoria. Sin embargo, la segunda parte se tornó friccionada y violenta que desató las protestas de ambos equipos ante la pasividad del árbitro chileno Julio Bascuñan que dejó pegar demasiado y no recurrió al VAR en jugadas polémicas.
El final del encuentro estuvo marcado por el escándalo a causa de que los dos conjuntos se le abalanzaron al juez por faltas que no sancionó.
Por otro lado, Lanús fue primero en el Grupo 7 con 13 puntos al igual que Gremio en el Grupo 8, y en el total de las fases (semifinales incluidas), los granates convirtieron 21 goles, recibiendo 9; mientras que los tricolores anotaron 22 tantos y también les marcaron 9.
Ahora, el encuentro de vuelta se disputará el miércoles (29/11) en el estadio “Néstor Díaz Pérez”, sin que valga el gol de visitante, por lo que en caso de que el "Granate se imponga por un gol de diferencia jugarán tiempo suplementario y de persistir, remates desde el punto del penal.
En relación a la victoria del ‘Imortal Tricolor’ sobre el ‘Granate’, en la primera mitad, los dos equipos mostraron un nivel demasiado parejo con situaciones peligrosas de un área a otra de la cancha.
A partir de los 10’, Lanús tomó el control de las acciones con las jugadas peligrosas de José Sand asociándose con José Gómez quiénes elaboraron una buena triangulación que forzó el despeje de Ramiro.
En tanto, a los 16’ Luan disparó un tiro débil que quedó en las manos del arquero Esteban Andrada.
No obstante, el ‘Granate’ trabajó bien el control de la pelota con la ayuda de los centrales mientras que el ‘Rei de Copas’ buscó variantes en las pelotas aéreas. Por momentos, el encuentro estuvo demasiado disputado desde el círculo central debido a que los dos atinaban a defenderse y a no arriesgarse.
A los 33’ ‘Pepe’ Sand desbordó por la derecha y le envió un pase a Román Martínez que descargó un fuerte tiro que desvió el guardavalla Marcelo Ghohe.
Por otra parte, el ‘Tricolor Gaúcho’ se rearmó de la mano de Ramiro y Luan, dispuso de un centro desde la derecha que no llevó peligro al arco de Andrada a los 37’.
En el cierre, Alejandro Silva dispuso de un tiro de esquina para Lautaro Acosta que envió un cabezazo espectacular que despejó el arquero Grohe con el antebrazo.
En el final, Lucas Barrios estuvo cerca de abrir el marcador pero su acción fue abortada por Alejandro Gómez dentro del área lo que desató las protestas contra el árbitro Bascuñan; antes del pitazo, Iván Marcone le cometió una falta dentro del área a Ramiro que motivó los reclamos de penal ante el juez.
Ni bien comenzada la segunda mitad, Gremio salió de entrada a presionar a Lanús desde la mitad de cancha empujándolo sobre su campo.
De ahí, el ‘Granate’ se sentía incómodo con las subidas peligrosas de Edilson, Arthur, Jailson y Bruno Cortez.
Cuando transcurrían los 10’, Bruno Cortez descargó un tremendo remate bajo que forzó la intervención de Esteban Andrada. Por lo tanto, el equipo de Jorge Almiron se sentía muy mal porque Gremio lo asfixiab a con los pelotazos de Edilson y Arthur.
Con el correr de los minutos, el ‘Rei de Copas’ sacó provecho de los problemas defensivos del ‘Granate’ con la aparición del recién ingresado Jael Ferreira que disparó un remate desde afuera del área que rápidamente controló Esteban Andrada.
De manera impensada, el otro ingresado Cícero Santos puso en ventaja 1-0 a Gremio tras ser asistido por Jael Ferreira luego de un grosero error de la defensa granate.
En el epílogo, el encuentro estuvo detenido durante tres minutos por el humo de las bengalas que habían prendido los hinchas de Gremio.
El cierre estuvo marcado por el escándalo a causa de que el árbitro Julio Bascuñan no expulsó a Geromel por propinarle un fuerte pisotón a Lautaro Acosta; en medio de un tiro libre, el juez Bascuñan expulsó Diego Braghieri por protestar.
Finalmente, los jugadores de ambos equipos se le abalanzaron al árbitro porque fue demasiado permisivo y casi no sacó ninguna tarjeta.
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