(DP) - Fiel al estilo que exhibió en esta última etapa, San Lorenzo no brilló, pero supo aguantar la embestida de Atlético Mineiro y con el empate, abrochó el objetivo de clasificar a la próxima fase de la Copa Sudamericana. El Pampa Biaggio planteó el partido sin descuidar dos detalles trascendentales.
Primero, que tenía la ventaja de la victoria (por uno a cero), en el choque de ida, y al mismo tiempo, juntó las líneas de su equipo, para tratar de disimular las ausencias que se van acumulando en el plantel azulgrana, porque a último momento se lesionó Nicolás Blandi, y así Nicolás Reniero fue la única referencia de ataque de San Lorenzo, que trató de llegar con los volantes, por afuera, pero al mismo tiempo armó una triple contención con Moyano, Mercier y Piris da Motta, para no entregarle ventaja a Atlético Mineiro, que puso un elenco de emergencia, pues decidió darle prioridad al torneo local.
El escenario se planteó claramente con estos parámetros: el local llevaba la iniciativa, tratando de romper el cerrojo del Ciclón con la velocidad de sus atacantes, y al mismo tiempo, San Lorenzo jugaba sus fichas al contraataque, sin exhibir demasiado apuro para buscar los dominios de Víctor, uno de los pocos titulares que respetó Atlético Mineiro.
Con este panorama, no sorprendió que en el primer capítulo, el peligro rondara, con insistencia, el arco defendido por Navarro. Porque Atlético Mineiro avisó de entrada con un remate a colocar, desde la puerta del área, de Alerrando, aunque sus principales llegadas derivaron de corridas de sus volantes.
Es que tras un tiro de esquina a su favor, San Lorenzo quedó mal parado en defensa y eso propició el contraataque del local, que tuvo a Elías en magnífica posición para definir cuando estaba cara a cara con el uno del Ciclón, pero se tropezó en el último paso, y eso le restó justeza a su disparo, que terminó siendo rechazado por Mercier.
Y más tarde, el argentino Tomás Andrada armó una gran maniobra, cedió para Alerrando y no fue gol brasileño debido a que Paulo Díaz fue al piso y rechazó, con los pies, como si fuera un arquero, cuando Navarro ya no tenía nada que hacer.
Y en medio de sucesivos ataques de Atlético Mineiro, el Ciclón contestó con una aparición sorpresiva de Gudiño, que, sin demorarse, hizo pecho y remate por arriba del travesaño.
En el complemento, no cambió el panorama y de arranque, Navarro tuvo una atajada espectacular, para desviar un tiro de Yago, y un ratito después, fue a un costado para ahogarle el grito a Elías, quien recibió solo ante un taco de Alerrando.
Atlético Mineiro siguió presionando, lo acorraló al Ciclón, pero no tuvo golpe de nocaut, y chocó con la figura del arquero de San Lorenzo, que bajó la persiana.
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