(U24) - Hasta no hace mucho, los hermanos Daer coincidían públicamente como en febrero pasado cuando Rodolfo se bajó de la marcha del 21F convocada por Camioneros en contra del Gobierno de Mauricio Macri.
Héctor, el triunviro de la CGT, tampoco apoyaba la manifestación donde se denunciaba una persecución judicial contra Hugo Moyano. Pero el tiempo pasó, y sus coincidencias también.
Ahora Héctor negocia con el Gobierno para no convocar a un paro y Rodolfo se muestra más combativo y amenazó con bloquear plantas alimenticias para reabrir paritarias.
Héctor, proveniente del gremio de Sanidad, fue la semana pasada la cara visible del sindicalismo que negoció con el Gobierno nacional el pago de un bono de fin de año obligatorio para el sector privado de $ 5.000.
Ante los avances en la mesa de negociación con algunos empresarios, durante una entrevista periodística el líder cegetista desestimó la convocatoria a un paro general. Esa afirmación le valió las críticas del sindicalismo combativo, encabezado por los Moyano.
Pero el bono se complicó cuando la Unión Industrial Argentina advirtió que 6 de 10 empresas no podría pagarlo, y empezaron a poner condiciones al beneficio, que la CGT rechazó.
Desde entonces, el Gobierno nacional empezó a buscar una salida al conflicto y congeló el decreto con el beneficio. Daer espera.
Quien no espera es su hermano Rodolfo, histórico Secretario General del Sindicato de Trabajadores de la Alimentación (STIA) y extitular de la CGT.
Rodolfo está amenazando con realizar bloqueos en las plantas de Arcor, Bimbo, Pepsico, Molinos y Mondelez, entre otras empresas grandes y medianas, para forzar al sector empresario a retornar la negociación paritaria.
El gremio se propone impedir los ingresos y salidas de camiones de las fábricas, pero no el acceso de los trabajadores. Se esperaba este lunes la intervención del Ministerio de Producción y Trabajo y una posible conciliación obligatoria.
"Más allá de las diferencias que podamos tener bajo ningún concepto se puede cortar el diálogo que estábamos teniendo por paritarias de manera unilateral y por teléfono", dijo al diario Clarín Rodolfo Daer.
El sindicalista argumenta que la traba que sufrió el bono de fin de año interrumpió las negociaciones paritarias del sector.
De hecho, uno de los empresarios de ese sector es Daniel Funes de Rioja, el vice de UIA y titular de la Cámara de la Alimentación (Copal), quien fue la voz cantante de la oposición empresarial al bono.
El STIA había firmado en junio un acuerdo del 25,5% contemplando un alza en mayo, del 11% sumado a un 1,5% por inflación.
A estas sumas se la adicionaban un aumento del 7% en octubre y otros seis puntos en enero: Daer buscaba adelantar el aumento de enero a octubre.
No hay comentarios:
Publicar un comentario