Natalia Fernández
CIUDAD DE BUENOS AIRES (Urgente24).-Este jueves 19/02, la "testigo ocasional" de las pericias en el departamento del Fiscal Federal Alberto Nisman, declaró en la Fiscalía de Viviana Fein y confirmó la información que dio a los medios.
Natalia Gimena Fernández, de 26 años, quien el martes denunció ante la prensa serias irregularidades durante los procedimientos que se realizaron la madrugada del 19/01 en la torre Le Parc. La fiscal recibió a la testigo pasadas las 10.30 de la mañana.
Días antes, la letrada definió como "descabellados" sus planteos sobre el ruido de una aspiradora que escuchó antes de entrar a la unidad 13 y afirmó además haber visto que subrayaban con marcadores los papeles de Nisman.
En diálogo con el diario Clarín, la testigo denunció que se manipuló el celular del investigador de la causa AMIA, se subrayaron papeles de trabajo y hasta se usó una cafetera del lugar.
Además dijo que Fein le mostró una bolsa con cinco "casquillos de bala, pititos o algo así", que en la escena del hecho se dijo que "el disparo en la cabeza" que recibió el fiscal fue realizado "a 11 centímetros de distancia" y que, "en el edificio de enfrente, encontraron un casquillo de un francotirador de un arma que no hay en Argentina".
La testigo, de 26 años, relató que, el domingo 19/01, a la 1 de la madrugada, ella y una amiga caminaban por la avenida Alicia Moreau de Justo cuando las interceptó un vehículo de Prefectura Naval, con agentes que la convocaron a presenciar el operativo.
La testigo reveló que "una de las cosas más locas" que presenció fue que, "en un momento, apareció un tipo vestido de astronauta (por un perito), con otro que traía un polvo negro de huellas que había marcado".
"Los 'astronautas' traían el celular del fiscal que no paraba de vibrar. Dijeron que nadie lo tocara y que era prueba. Lo pusieron ahí nomás y una mina de Prefectura lo agarró como si nada porque no paraba de sonar", afirmó.
"Yo misma empecé a decir 'no, no, dijeron que no lo toquen, es el teléfono del tipo al que mataron'. La mina soltó el teléfono y hubo carcajadas", remarcó.
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