CIUDAD DE BUENOS AIRES (Urgente24).- Tras las graves episodios del último superclásico entre Boca y River en la Bombonera, el plantel ‘millonario, ya clasificado a los cuartos de final luego de la sanción al ‘xeneize’, se prepara para enfrentar al Cruzeiro de Belo Horizonte, un rival duro que no le trae muy buenos recuerdos.
El equipo de Marcelo Gallardo tiene posibilidades de acceder a una instancia que River no juega desde 2005, cuando fue eliminado por otro brasileño, el San Pablo.
Ahora, el conjunto de la ‘banda roja’ deberá demostrar algo más que el juego agresivo que le permitió vencer a los de la ‘ribera’ en el Monumental.
En tanto, el panorama dentro del plantel ‘xeneize’ se encuentra bastante complicado debido a que se formó un plantel muy caro para pelear hasta la final la Copa Libertadores y la eliminación a manos de River genera dudas y aumenta la necesidad de ganar el torneo local para mostrar algún logro, especialmente para la gestión y el futuro del presidente de Boca, Daniel Angelici.
Con sólo el título de la Copa Argentina de 2012 en su haber, los hechos del jueves son un golpe del cuál será difícil reponerse, y sus posibilidades de reelección parecen alejarse, por lo que se avecina en Boca un cambio político en diciembre, cuando se celebren las elecciones, excepto que el campeonato local haga olvidar lo ocurrido.
En lo futbolístico, Rodolfo Arruabarrena deberá hacer un gran trabajo para remontar la doble eliminación por River en apenas 6 meses en el plano internacional. Y todo indica que sólo un título en el torneo local, del cuál es líder invicto, le puede dar la chance de seguir en el cargo.
Pero la eliminación de la Libertadores seguramente obligará a los dirigentes a reducir el plantel. La idea de Angelici de dar un golpe de efecto con la llegada de Carlos Tevez después de junio, y la continuidad de Daniel Osvaldo, corre serio peligro ante el perjuicio económico que significaron los hechos del jueves: casi cuatro millones de dólares que Boca dejará de ganar.
Según una nota publicada en el diario La Nación, a Daniel Osvaldo sólo le quedarían tres partidos para jugar con la camiseta xeneize antes del receso: Aldosivi, Vélez y Newell's. Los dirigentes quieren convencerlo de que renueve el vínculo, pero no será fácil la negociación.
De los futbolistas que lograron cotizarse, Marcelo Meli y Jonathan Calleri serían los que más ofertas tendrían para emigrar. Al volante lo pretenden desde Portugal y de Italia; al punta lo buscan desde Francia, Italia e Inglaterra.
En la lista de posibles bajas, también ingresarían Juan Manuel Martínez (perdió mucho terreno), el arquero Emanuel Trípodi y el lateral José Fuenzalida, dos que están en puestos con más de dos variantes.
En consecuencia, La Nación reveló que el ‘vasco’ Arruabarrena también deberá jugar su partido. El entrenador habló el domingo 17/05 con los jugadores y luego diagramó una práctica en un clima normal, aunque buscando ejercicios distendidos para aflojar la presión de las últimas horas.
Este lunes (18/05) tendrán el día libre y volverán a juntarse el martes (19/05), para empezar a preparar el próximo partido. Pero Arruabarrena sabe que debe rearmar filas y volver a encaminar a un grupo que quedó expuesto con algunas reacciones en medio de la suspensión del superclásico.
Incluso su liderazgo ante el grupo deberá recuperar forma en función de las decisiones futbolísticas que tome en los próximos días, ya que tiene en la mira hacer cambios. Otro conflicto a resolver: la semana pasada, Angelici había adelantado que en el receso iba a intervenir el departamento médico del club, que pensaba en cambios a raíz de inconvenientes que se generaron con la lesión de Andrés Cubas.
Antes de viajar a Paraguay, el presidente Angelici reconoció que estaba molesto y que pensó en renunciar a la vicepresidencia de la AFA: “Es una posibilidad muy cierta porque se dicen muchas cosas y se hace poco. Cada día estamos peor”, señaló en declaraciones al programa Animales Sueltos, por América TV. Lo podría hacer el martes, en la reunión del Comité Ejecutivo del Edificio de la calle Viamonte.
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