La muy esperada reunión entre el Papa Francisco y Mauricio Macri quedó en dudas cuando se conoció este jueves (25/2) que Bergoglio padecía una “leve indisposición” con “algunas líneas de fiebre” que lo obligaron a suspender sus actividades por el resto del día.
La visita del presidente argentino al Vaticano significa el primer encuentro que mantendrá el Sumo Pontífice con el mandatario electo en octubre pasado y que se espera que disipe dudas acerca de la relación entre ambos, después de que Bergoglio no lo saludó por su victoria electoral y el reciente antecedente del rosario que le regaló a Milagro Sala, detenida en Jujuy.
En el gobierno de Macri esperan que la visita oficial sirva para relanzar el vínculo entre ambos líderes. También formarán parte de la comitiva gobernadores opositores: Rosana Bertone (Tierra del Fuego) y Juan Manuel Urtubey (Salta) y el aliado radical Alfredo Cornejo (Mendoza).
Por su parte, la canciller Susana Malcorra viajará en un vuelo más tarde debido a que deberá acompañar al presidente francés, François Hollande, al aeropuerto cuando concluya su visita oficial, en tanto tampoco retornará a Buenos Aires junto a Macri porque tiene prevista una agenda de actividades en Ginebra.
Hospedado en un hotel a la vuelta de la céntrica Piazza di Popolo, Macri mantendrá el viernes (26/2) por la tarde reuniones preparatorias de cara a la agenda del día siguiente, y en la Casa Rosada ultimaban los detalles de las actividades de ese día, que podían contemplar una reunión con el rector de la Universidad de Bologna.
Al día siguiente, el sábado, la agenda comenzará a las 9.30 (hora de Italia) con una audiencia bilateral y privada con Francisco, la cual "está prevista que dure entre 30 y 45 minutos", informaron a la agencia estatal Télam fuentes oficiales.
Luego, se sumarán a la reunión los gobernadores y funcionarios y se realizará el protocolar intercambio de regalos entre los jefes de Estado y la foto de ocasión.
Esta mañana, el vocero papal Federico Lombardi informó que el Papa “está con algunas líneas de fiebre" por lo cual fueron reprogramadas las audiencias del día, aunque aclaró que por el momento el resto de las actividades previstas por Bergoglio para los próximos días sigue sin modificaciones.
Macri y Francisco no se hablan desde el 17 de diciembre pasado, cuando el flamante presidente lo llamó por teléfono para saludarlo por su cumpleaños.
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