Después del tarifazo en la energía eléctrica y el gas, es el turno de la telefonía fija. Si bien el impacto es menor ante el avance de los teléfonos celulares, la intención del gobierno es actualizar los valores que no se tocan desde 2001, hace 15 años.
Ya el 1ro de marzo el Gobierno nacional había reconocido que estudiaba un pedido de las empresas de telefonía para incrementar las tarifas del servicio de líneas fijas.
"Las compañías nos dicen que no pueden invertir en agregar más torres móviles para mejorar su servicio porque tienen que subsidiar al sector de telefonía fija con tarifas congeladas, para lo cual usan los ingresos de las cuentas de telefonía móvil", sostuvo la secretaria de Promoción de Inversiones del Ministerio de Comunicación, Clarisa Lifsic, en declaraciones a la agencia de noticias Bloomberg.
La funcionaria aseguró que los clientes de telefonía fija de Argentina tienen en la actualidad las tarifas más baratas de América Latina y anticipó que los costos subirían en los próximos meses a medida que el Gobierno avance en limitar los subsidios.
"Nos gustaría calificarlo de reequilibrio, ya que después del aumento de la telefonía fija, la tarifa móvil bajaría por efecto de la competencia", indicó.
Finalmente se confirmó la versión y a partir de mayo, los usuarios podrían percibir un 240% de incremento en sus boletas.
Héctor Huici, secretario de Tecnologías de la Información y las Comunicaciones (TIC) del Gobierno, declaró al diario Clarín que las telefónicas anunciaron su intención de aumentar el abono residencial -no los pulsos- que está congelado en $ 13 más IVA, a partir de mediados de mayo y aumentaría a $45 ó $ 50 más IVA.
El servicio básico telefónico antes estaba regulado por tarifas que fijaba el Estado. Pero la Ley Argentina Digital, que motorizó el kirchnerismo y se sancionó a fines de 2014, convirtió esas tarifas en precios libres.
Además, el DNU 267, que dictó el presidente Mauricio Macri a fines del año pasado, derogó una parte de la legislación que otorgaba a la Autoridad de Aplicación la facultad para regular opcionalmente esas tarifas.
De este modo, las tarifas de telefonía fija se convirtieron en precios libres, que podrán ser observados y cuestionados por el Estado en caso que haya "abuso de posición dominante" de las empresas, dijo Huici.
El funcionario aseguró que también planean avanzar hacia una oferta de planes de tarifa plana en telefonía fija, "para que el usuario pague un precio y pueda hablar todo lo que quiera, como se ofrece en muchas partes del mundo".
Con estos cambios, el gobierno busca incentivar la competencia entre operadores, mayor oferta y la convergencia de servicios, que se podrán brindar paquetizados, tal como hoy ofrece Telecentro, que brinda televisión paga, Internet y telefonía por un sólo precio.
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