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| FOTO ARCHIVO DE UN ENCUENTRO ANTERIOR |
Guillermo Moreno, el exsecretario de Comercio de la Nación y actual agregador económico en la embajada argentina en Roma, vivió esta mañana dos sensaciones enfrentadas: fue saludado con mucha cordialidad por el papa Francisco en una celebración en el Vaticano después de haber sido abucheado fuertemente por argentinos que estaban en la Plaza San Pedro.
El saludo fue breve pero con mucho afecto y la reprobación de algunos de los presentes hacia el funcionario se hizo sentir, según relataron al diario La Voz del Interior testigos de la escena.
Fue en la celebración del 50º aniversario de la Declaración del Concilio Vaticano II Nostra aetate sobre las relaciones de la Iglesia Católica con las religiones no cristianas.
"El respeto recíproco es condición y, al mismo tiempo, fin del diálogo interreligioso: respetar el derecho de otros a la vida, a la integridad física, a las libertades fundamentales, es decir a la libertad de conciencia, de pensamiento, de expresión y de religión", dijo Francisco, ante la concurrencia en la que estaba el funcionario argentino, que se caracterizó por sus agravios a críticos del Gobierno, empresarios y a la prensa no alineada con el oficialismo.
Moreno es un ferviente católico y uno de los kirchneristas que celebró la designación de Bergoglio como Papa, en los primeros días en los que la Presidenta y sus colaboradores tenían cierto recelo por la unción del argentino.
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