CIUDAD DE BUENOS AIRES (Urgente24). "Les recordaremos más de una vez lo que han hecho y se arrepentirán más de una vez de lo cometido. Sabemos qué hay que hacer", puntualizó el presidente ruso, Vladimir Putin, este jueves 3/12 en un discurso anual muy duro ante la Asamblea Federal.
En referencia al derribo del cazabombardero Su-24 del pasado martes 24/11 por parte del Ejército turco en espacio aéreo sirio durante la misión del Ejército ruso para neutralizar al Estado Islámico (ISIS), el primer mandatario volvió a cargar contra el gobierno de Recep Tayyip Erdogan por considerarla una de las peores decisiones que pudieron haber tomado.
"Sabemos quién se está llenando los bolsillos en Turquía y permite a los terroristas ganar dinero", afirmó Vladímir Putin. Con un tono más amable para con los ciudadanos turcos pero muy agresivo para sus gobernantes, aclaró que"el pueblo turco es bueno, trabajador y talentoso" y que en Turquía Rusia tiene "muchos viejos amigos fieles".
Y voy a subrayar que no los comparamos con una parte de la cúpula gobernante que es la responsable directa de la muerte de nuestros militares en Siria". Por otro lado, disparó: "No nos olvidaremos de esta complicidad con los terroristas". "No entiendo por qué lo han hecho. Cualquier problema, cualquier desacuerdo, que ni siquiera veíamos, se podría haber resuelto de una forma completamente distinta", continuó.
El líder ruso sostiene que la causa del derribo del avión de combate de su Ejército por parte del turco tiene que ver claramente por la ofensiva que han tomado contra el Estado Islámico en este último tiempo.
Voceros del gobierno aseguraron que tienen pruebas suficientes para comprobar las relaciones económicas que mantienen con los terroristas, basadas la compra del petróleo. "La amenaza terrorista va en aumento", señaló Putin. En ese contexto, afirmó que es complicado combatir a los terroristas cuando organizaciones como el EI reciben "un apoyo financiero permanente".
"Sabemos quién se está llenando sus bolsillos en Turquía y permite ganar dinero a los terroristas", señaló el presidente. "Si alguien piensa que se librará con [la restricción de] tomates, o con algún tipo de restricción en el ámbito de la construcción u otros tras haber cometido un infame crimen de guerra, el asesinato de nuestra gente, está profundamente equivocado".
Al iniciar su discurso, el presidente solicitó un minuto de silencio en memoria de los militares rusos ―el piloto Oleg Péshkov y el infante de la marina Alexánder Pozínich― que murieron tras el derribo.
En tanto, el presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan -refugiado por la OTAN (bloque del cual su país forma parte)-, considera un tanto desproporcionada la reacción y aseguró que no quiere agravar la tensión en las relaciones con su vecino país, aunque advirtió que tomará contramedidas si Rusia sigue actuando igual.
"No hemos mostrado un comportamiento emocional, ni lo tendremos. No tenemos la idea de agravar la tensión, vamos a actuar de forma diplomática, pero si Rusia sigue actuando igual tomaremos contramedidas. Lamentamos la reacción desproporcionada rusa", subrayó. Mientras Rusia planea un corte del gas proporcionado a Turquía -considerado inminente por muchos-, Erdogan ya planea un pacto con Qatar.
"Espero que no haya una crisis con las entregas desde Rusia; sin embargo para protegernos de las contingencias nuestro presidente firmó en Catar un nuevo acuerdo sobre los suministros de gas natural licuado", dijo el viceprimer ministro otomano, Numan Kurtulmus.
En 2014 Turquía importó 47.600 millones de metros cúbicos de gas natural, un 60% de esta cantidad desde Rusia. Lo cierto es que el gobierno ruso llamó a sus habitantes a no vacacionar en el país turco, siendo esta la primera medida como sanción.
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