VANOLI ADMITIÓ QUE SU MUJER Y SU HIJO "NO FUERON DESIGNADOS POR CONCURSO"

POLÍTICA / DESPIDOS EN EL BCRA 

ALEJANDRO VANOLI

El ex presidente del Banco Central (BCRA), Alejandro Vanoli, criticó los despidos que efectivizó ayer (28/01) la nueva cúpula del organismo -un listado de 47 personas entre las que figuran su pareja y su hijo-, y aseguró que esto responde a una política de “persecución ideológica y vaciamiento del Estado”. 


“Despidieron solo a gente que yo nombré, sin evaluar su capacidad. Han echado personal del BCRA que estaba contratado en planta permante, otros que entraron por concurso y gente que cumplía tareas, que cumplía horario de 10 horas. Ha echado gente con posgrados en el exterior”, precisó.

En diálogo con Radio con Vos, Vanoli reconoció que las designaciones de su pareja y su hijo "no fueron por concurso pero el presidente del Banco tiene la atribución por Carta Orgánica de designar pesonal en virtud de las necesidades y competencias".

 Y aclaró que es una práctica que se viene realizando desde hace años. En este sentido, le apuntó a su sucesor, Federico Sturzenegger: “Hizo designaciones a dedo y echó a gente histórica con más de 30 años en el BCRA”.

“Esto es discriminación ideológica. Han apuntado selectivamente a áreas críticas del banco como por ejemplo donde se verificaban las operaciones cambiarias ilegales. También eliminaron a las personas de centro de atención telefónica que tomaba los reclamos de la gente”, informó.

En este sentido, aseguró que lo sucedido ayer “no pasó jamás en la historia del BCRA” y anticipó que para hoy se espera el despido de otras 45 personas. Al ser consultado sobre las medidas financieras que tomó el gobierno de Mauricio Macri, Vanoli opinó que de haber ganado Daniel Scioli se hubiesen realizado “modificaciones graduales en la paridad cambiaria y en las restricciones”.

“La forma en que se hizo produjo un aumento significativo de la inflación. Cuando hay una bruta devaluación, los precios se ajustan y las consecuencias son muy negativas para el salario real. Había cambios que no podía hacer un gobierno saliente, si un gobierno entrante con toda la credibilidad”, analizó.

Y agregó: “La devaluación fue una decisión política y no creo que fuera inevitable”.