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En un clima enrarecido por las denuncias de amenazas contra un sindicalista, el Gobierno Nacional reiteró este lunes el objetivo de que las provincias lleguen a acuerdos salariales con los docentes que no superen el 25%.
No obstante, desde la Casa Rosada anticiparon aportes para que el cierre definitivo alcance entre el "30% y el 32%" de suba. Mientras tanto, desde los gremios aseguran que las paritarias están "trabadas" a una semana del inicio previsto para el ciclo lectivo.
En conferencia de prensa, el jefe de Gabinete, Marcos Peña, aseguró que "con los gobernadores hemos acordado que las provincias trabajen sobre una idea (de aumento salarial) del 25%, más una asistencia que el Gobierno nacional brinda para poder llegar al 30 ó 32%" para este año.
Peña también rechazó la idea expuesta por los gremios docentes de que primero se fije la paritaria nacional como referencia para las provincias.
Desde la semana pasada, el Gobierno insiste en que sean primero los gobernadores los que cierren la paritaria acorde a lo que pueden pagar. Desde Casa de Gobierno, donde presentó el plan de "modernización del Estado", Peña aseguró que "la educación es un servicio que brinda el Estado nacional descentralizado en las provincias.
Desde hace varios años, la Nación establece un piso para el salario mínimo". "Eso se conoce como paritaria nacional. Pero la paritaria real ocurre en cada una de las provincias. Nosotros venimos conversando con todas las gobernaciones para coordinar una política única" en torno a los salarios, indicó el jefe de ministros.
"Lo que no vamos a hacer es lo que hacía el gobierno anterior, que firmaba una paritaria que no contemplaba la realidad de las provincias. Y después dejaba que cada una de ellas resuelva; eso no es resolver el problema", enfatizó.
Peña garantizó que el Gobierno quiere "que ésto se resuelva lo más rápido posible para que las clases comiencen normalmente".
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