La titular de Aerolíneas Argentinas, Isela Costantini, se sinceró ante empresarios: "No es un ambiente fácil donde quiera hacer mi carrera".
La presidente de Aerolíneas Argentinas, Isela Costantini, fue de frente y, con una sola frase, dejó en evidencia qué es lo que quiere para el cargo que asumió hace cuatro meses: "Mi objetivo es transformar Aerolíneas para que sea una empresa mejor".
La ex CEO de la automotriz General Motors en el país disertó sobre "El rol social del Estado y del empresariado", organizado por la Asociación Cristiana de Dirigentes de Empresa (ACDE). "No tengo una ambición política y no quiero tener una carrera política", dijo.
Pero no se detuvo allí. Sabe (y lo dice) que no es un ambiente fácil, aunque considera que es un lugar donde puede "devolver y transformar".
Esta semana, la titular de Aerolíneas y Austral envió una carta a los más de 12.000 empleados para que hagan un esfuerzo adicional en el recorte de costos. "Necesitamos movernos con más rapidez", aseguró en el escrito.
Luego de varios años en el sector privado, dijo que ahora trabaja menos horas que antes, pero esas horas son mucho más intensas. "Mis 10 ó 12 horas en Aerolíneas son más estresantes que mis 14 a 16 horas por día en General Motors. Porque todo lo que uno dice y hace, hay que medirlo mucho más", explicó.
Durante su presentación, Costantini sostuvo: "Son 12.000 empleados que aman la empresa y 40 millones de argentinos que son la empresa. Yo trabajo para ellos y, el día que no me quieran más, me voy a tener que ir".
Al referirse a los empleados y los gremios de la aerolínea estatal, Costantini explicó que la clave está en integrar a los gremios y a los empleados en el estado de situación de la empresa. "Tenemos que ser transparentes", afirmó poco antes de la reunión de Directorio de este mediodía a la que convocó a directores y síndicos de la empresa el 2 de mayo pasado.
FUERTE RECORTE DE SUBSIDIOS
Tras el fuerte recorte de subsidios que el Gobierno, a través de Mario Quintana, decidió aplicar para las dos líneas aéreas, voceros de Aerolíneas admitieron que los fondos que restan girarle desde el Gobierno alcanzarían para pagar los sueldos de junio, el medio aguinaldo y no mucho más.
"Se están evaluando distintas alternativas de financiamiento", agregaron. De ahí que hay varias rutas internacionales en la mira y que ayer se conociera que desde el 31 de julio no volará más a Cuba. Una de las vías para compensar el recorte de subsidios de US$162 millones sería la venta y posterior alquiler de dos aviones Airbus A330 a medio pagar que están por llegar a la empresa .
En Aerolíneas admitieron que esa "es una de las alternativas" que se están analizando. Fuentes del sector dijeron al diario 'Clarín' que hay gestiones en ese sentido con General Electric Capital Aviation Services (GECAS), la división financiera del gigante eléctrico: la expectativa, si se concretara esta operación, sería obtener unos 60 millones de dólares.
También están a la venta cuatro viejos Airbus A340, de la época en que la gerenciadora de Aerolíneas era American Airlines: son máquinas de 25 años de antigüedad, que se venden para desguace, y podrían aportar unos 6 millones de dólares en total.
"En este momento, todo suma", agregaron dentro de Aerolíneas. Los dos temas forman parte del orden del día de la reunión de directorio, agendada para hoy.
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