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| MALCORRA/MACRI EN EL MERCOSUR - FOTO NA |
CIUDAD DE BUENOS AIRES (Urgente24). La falta de una convocatoria a sesiones extraordinarias no sólo fue un dolor de cabeza por la designación por decreto de los 2 jueces de la Corte Suprema de Justicia, sino que complica además otro sector: son varios los embajadores cuya actividad se ve paralizada.
La semana pasada, la canciller, Susana Malcorra, señaló que "probablemente" algunos embajadores sean designados por decreto presidencial, para así "acelerar el proceso para poner en movimiento algunas de las embajadas claves".
En diálogo con Radio Mitre, la funcionaria afirmó que "el nombramiento de los embajadores va a pasar por el Senado, estamos tratando de ver si hay alguna posibilidad de acelerar el proceso para poner en movimiento algunas de las embajadas claves".
"Hay un mecanismo que tiene que ver con la designación por parte del Presidente y es el que probablemente termine usándose" para cubrir algunas sedes diplomáticas. La ley del servicio exterior permite que los gobiernos nombren hasta 25 embajadores políticos mientras que el resto deben ser diplomáticos.
Las administraciones suelen enviarlos a lugares centrales para la política exterior. Los gobiernos democráticos de Raúl Alfonsín, Carlos Menem, Fernando de la Rúa y Néstor y Cristina Kirchner siempre ocuparon esas 25 vacantes con cargos políticos en el exterior con referentes de su confianza, o bien, para cumplir con favores políticos a la oposición de turno.
Consultada por el papel que buscará darle al Palacio San Martín, Malcorra resaltó que la Cancillería es "la cara hacia afuera de la Argentina y tiene que trabajar de manera muy coordinada con todos los ministerios para presentar al país de manera coherente al mundo. No sólo en los temas económicos, sino en seguridad, defensa, lucha contra el narcotráfico".
"Nuestro objetivo es explicar claramente que la Argentina está abierta a todo el mundo, para así maximizar las oportunidades de comercio, inversiones, exportaciones", remarcó.
En diálogo con el diario 'La Nación', la funcionaria no descartó que los enviados a los países correspondientes actúen"en comisión" hasta que se reanude la actividad parlamentaria y se avalen sus pliegos en el Senado. Esto implicaría, en la práctica, que haya "embajadores designados", como se les denomina en la Cancillería a aquellos embajadores políticos que no tienen el aval del Senado y sus funciones en el exterior estarán limitadas.
Macri y su canciller definieron en los últimos días las designaciones de 7 embajadores políticos contemplados en el artículo 5to de la ley del servicio exterior de la Nación.
Se trata de Ramón Puerta para ir a España, Carlos Magariños para Brasil, José Octavio Bordón a Chile, Guillermo Montenegro a Uruguay, Martín Lousteau para USA, Diego Guelar designado a China y Marcelo Stubrin a Colombia.
Pero, al no haber llamado a sesiones extraordinarias, el pliego de estos embajadores no podrá ser aprobado por el Senado hasta marzo.
"Podrían ir igual a sus destinos y empezar a hacer contactos, aunque su actividad estará muy limitada", admitió un funcionario del Gobierno que hizo una autocrítica respecto del error de Macri de no haber convocado a sesiones del Congreso desde el Poder Ejecutivo para este tipo de casos o para el nombramiento de jueces de la Corte Suprema.
En la práctica, estos embajadores podrán arribar a los países designados y entablar contactos con empresarios y sectores de la función pública, aunque es probable que el Estado que los reciba no les entregue las acreditaciones correspondientes para desarrollar a pleno su actividad.
En estas circunstancias se trataría de una situación incómoda la que deberían enfrentar los designados embajadores. El Gobierno avanzó el lunes en la designación de dos nuevos embajadores. Así, confirmó a Carlos Sersale para la embajada argentina en el Reino Unido y a Jorge Faurie para ir a Francia.
Faurie es un diplomático de carrera que fue jefe de protocolo durante el gobierno del ex presidente Carlos Menem y también fue embajador en Portugal. Cuando Carlos Ruckauf era canciller, Faurie se desempeñó como vicecanciller. Ahora le tocará la tarea inmediata de preparar la visita oficial del premier francés, François Hollande, a la Argentina en febrero próximo, que llegará para reunirse con Mauricio Macri.
Por otra parte, Sersale ocupará la embajada en Londres y tendrá, entre otras cosas, la complicada función de acercar al Gobierno con Gran Bretaña para dialogar por las islas Malvinas. Sersale fue embajador en Sudáfrica desde 2006. Pero tiene una larga carrera en el servicio exterior que se remonta a 1979.
Aún resta definir embajadas clave como la de Italia, la Unión Europea y México. Según el reglamento de la Cámara Alta, hay un plazo de tres semanas desde que llega el decreto presidencial con las designaciones hasta que pasa por la Comisión de Acuerdos del Senado.
Este plazo se estableció de esta manera para que haya un tiempo prudencial para que cualquier particular pueda realizar las impugnaciones respectivas al candidato que considere oportunas, aunque en la práctica nunca se cumplen estos plazos.
La Comisión de Acuerdos hoy está controlada por el peronismo, que podría objetar los nombramientos. Luego de ese plazo, el pliego se aprueba por el pleno del Senado nacional.
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