Federico Sturzenegger, el presidente del Banco Central (BCRA), salió ayer (26/4) a bajar cualquier expectativa sobre una baja en las tasas, al menos hasta que la inflación haya mostrado una baja, lo que según el gobierno de Cambiemos ocurrirá en el segundo semestre del año.
"Cuando estemos seguros de que bajó la inflación, bajaremos las tasas", indicó el titular de la autoridad monetaria que durante una disertación defendió la tasa de referencia del 38% para las Lebacs a 35 días.
El mensaje fue hacia afuera, pero también hacia adentro del propio gobierno, donde recibe críticas por las altas tasas.
"Sacando la evolución de los precios regulados, el resto de los bienes ha mostrado una visible desaceleración de su marcha en abril.
El Banco Central está ponderando cuán sostenido, definitivo y claro es este patrón, previo a decidir un acomodamiento de su política monetaria", dijo Sturzenegger.
El funcionario aseguró que existen "signos incipientes" de un freno en la suba del costo de vida, pero consideró que "no tienen la claridad ni la persistencia que se requeriría para alterar el nivel actual de la tasa de interés de política monetaria".
"Por lo tanto, este martes, la autoridad monetaria volvió a mantener su tasa de corte de Lebac de 35 días en 38% y dejó inalterado su corredor de tasas de pases activos y pasivos a uno y siete días", señaló en un informe difundido a través de un comunicado del BCRA.
Allí precisó que "durante la última semana se conoció la inflación oficial de marzo de San Luis, que se ubicó en 3% mensual, nivel levemente superior al de febrero pero claramente inferior al de enero y diciembre".
"Aunque se espera que la inflación de abril de la Ciudad de Buenos Aires sea elevada por la incidencia de los precios de los servicios públicos, diversas fuentes oficiales y privadas que el Banco Central sigue semanalmente continúan dando indicios de una desaceleración en la inflación subyacente este mes", destacó.
Y precisó que "el efecto monetario de la licitación de Lebac fue expansivo en $3.714 millones, lo que fue parcialmente compensado por un efecto contractivo de operaciones en el mercado secundario durante la última semana de $2.315 millones, con un efecto neto expansivo de $1.399 millones".
Ayer (26/4) en un discurso que dio en el Consejo de Profesional de Ciencias Económicas, Sturzenegger ahondo en el tema y expresó: "La tasa de interés marca cuán dura es la política monetaria. Si la inflación no cede, o está por encima del objetivo, se decide poner la tasa de interés más alta. Esto contrae la cantidad de dinero en la economía, lo cual desacelera los precios y modera las expectativas de inflación. Cuando la tasa de inflación desciende o se ubica por debajo de los objetivos, el Banco Central reduce la tasa de interés de referencia".
Luego, indicó otro problema monetario: “El exceso de dólares es el problema que estamos teniendo en este momento", y señaló que la vía tradicional para contrarrestar la apreciación del peso, la compra de dólares por parte del BCRA, genera el problema de que emite pesos, poniendo en jaque la política anti inflacionaria. "El tipo de cambio se va a apreciar en Argentina cuando tengamos un boom exportador", concluyó.
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