CIUDAD DE BUENOS AIRES (Urgente24). Daniel Scioli afirmó a CNÑ que no reducirá el plantel de empleados del Estado porque "los trabajadores no cargarán con el ajuste", y justificó el injustificable crecimiento de la mano de obra que paga el Tesoro Nacional, una de las características de los años K (12 períodos fiscales, de los cuales Scioli fue vicepresidente de la Nación durante 4 y gobernador de la mayor provincia argentina durante 8).
El economista que fue director para el Hemisferio Occidental en el Fondo Monetario Internacional, y también argentino, Claudio Loser, expuso la debilidad del discurso de Scioli, en especial cuando afirmó que la Argentina tiene una economía desendeudada: es cierto que es bajo el endeudamiento en el extranjero, pero es elevadísimo el endeudamiento público doméstico.
No obstante, el directivo de Eurasia Group, Daniel Kerner, defendió a Scioli porque, si bien la Argentina no se encuentra en un momento pujante ni en crecimiento, va a cambiar el enfoque, más allá de que Cristina Fernández de Kirchner conserve un nivel de aprobación muy elevado y que el 56% de la opinión pública apruebe algunas políticas de los K así como la corrección de otras, tarea que emprenderá Scioli, según Kerner.
Él insistió, además, en que Scioli se encuentra articulando una coalición de gobernadores peronistas, lo que le ayudará a frenar los reclamos y presiones de los Kirchner ya retirados del poder.
En cuanto al periodista y empresario Luis Majul, él dijo que no está claro quién va a ganar las elecciones porque pareciera estacionado entre 38% y 39%, sin perforar el 40%. Luego, Majul explicó su temor de una puja entre peronistas, en el horizonte inmediato de la Argentina. También qué ocurrirá con situaciones tales como Axel Kicillof presidiendo la Comisión de Presupuesto y Hacienda de la Cámara baja, quizá (él no lo dijo pero es cierto) Eduardo de Pedro como presidente del bloque oficialista, si Scioli es Presidente.
Ni hablar de las dificultades de procedimiento para cesar a Alejandra Gils Carbó al frente de la Procuración General, Oscar Parrilli como jefe del espionaje estatal y casi todo el directorio del Banco Central.
Al final, Oppenheimer editorializó acerca del despilfarro de recursos fiscales que ocurrió durante los años K (se volcó el dinero excedente a subsidios y gasto corriente en vez de destinarlo a formar recursos humanos y ampliar la infraestructura), las dificultades que tendrá la Argentina para obtener tanto financiamiento externo como inversiones directas si no realiza cambios importantes en sus políticas y los peligros que crecen y exigen veloces respuestas: Brasil pasando de moda como mercado emergente, la Alianza del Pacífico (Chile, Perú, Colombia y México) como atracción de Latinoamérica, y el nuevo Tratado TransPacífico de Comercio que reducirá mercados para muchos productos argentinos de exportación.
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