lunes, 28 de enero de 2019

HERMANAS ISRAELÍES: “TENÍAN INCRUSTACIONES DE HIERRO VÍA ANAL Y VAGINAL”

POLICIALES / NECROPSIA

 

(U24) - Macabro resultado de la necropsia a las hermanas israelíes desaparecidas desde el 12 de enero en Mendoza y cuyos cadáveres fueron encontrados el sábado pasado en la casa del hijo de una de ellas. 


Según el portal mendocino Los Andes, al momento de ser hallados sus cuerpos, Pirhya Sarussi (63) y Lily Pereg (54), estaban tapadas por piedras y tierra en un habitáculo similar a una hoguera, sin ventanas y con una construcción deficiente.

Este domingo se conocieron detalles de la necropsia a las dos mujeres pero los forenses no pudieron determinar la identidad de los cuerpos, producto de las lesiones que sufrieron, lo que tendrán que definir con un estudio de ADN.

Uno de los cuerpos presenta como causa de muerte impactos de arma de fuego, y el otro tiene lesiones de arrastre y otras causadas por maniobras de defensa y podría haber muerto por asfixia.

Otro de los detalles, es que luego de muertas, a ambos cuerpos se les ha incrustado hierros en distintas partes del cuerpo con heridas de egreso en algunos casos, lo que devela un alto nivel de ensañamiento hacia las hermanas.

Según el portal MDZ, las incrustaciones de hierros fueron realizadas por vía vaginal y anal en forma de empalamiento, post mortem. A una de las dos el hierro le atravesó la cabeza.

La principal hipótesis del móvil de los crímenes sería una disputa familiar de índole económica que involucra al hijo y sobrino de ambas hermanas, Nicolás Gil Pereg, hasta ahora el único detenido y en cuya casa aparecieron los cuerpos.

La fiscal del caso Claudia Ríos confirmó que "la causa de muerte de la más baja (en referencia al cuerpo de una de las mujeres) es por tres disparos de armas de fuego en la parte del tórax, que le atravesó el pulmón. Después eso le introduce un hierro de 8 milímetros, de esos que se usan para la construcción, se lo introduce por el ano y termina saliendo, oblicuamente, y le sale por la espalda y el vaginal -siempre a la mujer más baja- se lo entierra y le sale por el pecho y luego le atraviesa la cabeza de un lateral a otro. Esto es post mortem", sostuvo.

Luego la funcionaria de la justicia dio detalles de cómo fue la muerte de la más alta. "La más alta tiene muchas lesiones de signo de defensa de arrastre de lucha, de mucha lucha; en la cadera y en los miembros superiores, pero ese tipo de lesiones no le ocasionaron la muerte.

Tenemos que hacer estudios anátomos patológicos. Pero las lesiones de esta lucha no provocaron la muerte. Cuando muere le hace lo mismo que a la otra; le introduce el hierro pero con la diferencia que el vaginal y anal se los ingresa pero sin orificio de salida", explicó.

Gil Pereg quedó doblemente imputado: homicidio agravado por el vínculo en concurso real (en el caso de su madre) y homicidio simple (por su tía). Cuando el exmilitar israelí, que arriesga prisión perpetua, notó que su coartada llegó a su fin, amenazó con suicidarse, por lo que su seguridad se vio reforzada en la penitenciaría provincial.

Una de las hipótesis respecto al móvil es que Sarusi y Lily Pereg concurrieron a la casa del hombre a reclamarle por dinero que le enviaron y que nunca se logró recuperar. Ocurre que la principal fuente de ingresos declarada por Gil Pereg eran las remesas que le enviaban sus familiares desde Israel. Se cree que esas sumas de dinero terminaban en negocios poco claros.

De hecho, según MDZ Gil Pereg figura en 25 sociedades, en las cuales también aparece su madre Pyrhia Sarusi. Además, Pereg figuraba como denunciante en muchas causas y tiene algunos rasgos casi patológicos.

Ante la fiscal Claudia Ríos dijo estar preocupado por sus gatos y perros. Pero en realidad los animales estaban abandonados, enfermos y desnutridos. Es un hombre alto, sucio y extraño. Y se hacía llamar Floda Reltih (Adolf Hitler) en San Martín.

Según el diario UNO, una vecina de Gil Pereg contó: "Nosotros nunca tuvimos ningún problema con él. No lo veíamos seguido y cuando pasaba, algunas veces nos saludaba y otras no. A veces iba a comprar al supermercado y pasaba con las bolsas pero era muy reservado y extraño".

"Cuando salía a la calle los niños lo molestaban y le tiraban piedras pero él solo les reprochaba sin agredirlos. No lo visitaba nadie, nunca vi entrar a ninguna mujer ni tampoco a ningún amigo. Lo que sí me llamó la atención es que lo visitaban lindos autos, últimos modelos", continúo diciendo.

La vecina anónima sostuvo que nunca vieron a la madre y a la tía. También recordó cuando llegó al barrio. "Llegó un día hace como dos años, pero nunca trajo nada, ni muebles ni nada, llegó con lo puesto. Al principio acondicionó las canchas pero nunca las puso en funcionamiento", señaló.

No hay comentarios:

Publicar un comentario