jueves, 16 de junio de 2016

APURADA, GARRÉ SE 'DESPEGÓ' DE LÓPEZ PERO... ¿Y LAS OBRAS POST MUSEO ESMA?

CONFIDENCIAL / LOS K DESESPERAN POR DISTANCIARSE 

CONTI   /   GARRÉ   /   DE VIDO


"Las áreas en donde yo estuve, Seguridad y Defensa, no tienen que ver con la obra pública. Tuve escasísima relación con él. No sé ni cómo trabajaba", decía ayer (15/06) Nilda Garré, al referirse al escándalo protagonizado por José López, caso por el que dijo estar "indignada". 


Sin embargo, y pese al elegante intento de 'despegarse' del ex secretario de Obras Públicas, aseguran que éste se movía a sus anchas en el ministerio de Defensa que lideraba Garré. Tenemos que remontarnos a febrero de 2004, cuando el entonces presidente Néstor kirchner le comunicó al entonces jefe de la Armada Argentina, almirante Jorge Omar Godoy, que el 24 de marzo de ese año irrumpiría en las instalaciones de la ESMA junto a las Madres, Abuelas, Hijos y demás organismos de DDHH, para constituir allí un "Espacio para la Memoria".

Efectivamente, llegado ese día, se realizó la entrega del predio. En realidad la entrega fue simbólica, ya que antes de efectivizarla había que trasladar a todo el alumnado naval y para ello hacia falta tiempo, espacio y, obviamente, muchas obras.

Y aquí es donde entra en acción López...

El Gobierno dispuso generosas partidas presupuestarias para "relocalizar" a cada instituto educativo naval. Y en lugar de dejar el proyecto en manos de la Dirección de Material Naval y la Dirección de contrataciones de la Armada, el ministerio de Defensa resolvió poner todo en manos del Ministerio de Planificación Federal por intermedio de la Secretaría de Obras Públicas de la Nación a cargo de José López.

Urgente24 pudo saber por fuentes de la fuerza que si bien el personal de arquitectos e ingenieros de la Armada tuvo activa participación, no se recurrió al tradicional sistema de contratación normado por la Oficina Nacional de Contrataciones, si no que se echó mano al régimen de obra pública manejado a discreción por López.

 Cuentan que se invirtieron millones de pesos para construir, por ejemplo, un mega edificio en Vicente López que fue vendido a las autoridades navales como la panacea pero que hoy está muy lejos de ser terminado.

También se construyó una nueva escuela de suboficiales en Puerto Belgrano y se reciclaron las viejas instalaciones de las escuelas de náutica y fluvial para que regresen a su locación original. El liceo naval aún sigue alojado en precarias instalaciones ya que la fiesta presupuestaria se acabó antes de lo pensado...

"López comenzó a ser una figura conocida en el mundo de los uniformados, le gustaba 'caminar la obra' y siempre estaba dispuesto a algún generoso 'adicional' para satisfacer a los clientes. Los agraciados con las contrataciones resultaban ser siempre los miembros de un selecto grupo de empresas que se abrían paso en virtud de una particular alteración que se hizo del denominado 'Certificado de constructor de obra pública' que expide el Registro Nacional de Constructores de Obra Pública, por aquel entonces dependiente de Julio De vido pero manejado por los popes de la Cámara Argentina de la Construcción.

Este sistema permitía fijar arbitrarios requisitos de solvencia y capacidad técnica requeridos a los aspirantes a contratar con el estado, de tal suerte de poder despejar del camino a los 'proveedores molestos'", aseguró una fuente de la Armada, que pidió no revelar su nombre, a Urgente24.

Y continuó: "una vez que 'tomaron confianza' con ese mundo raro que constituyen los cuarteles, también incursionaron en obras de menor cuantía, las que si bien no entraban en los parámetros de 'obra pública' fueron amañadas para que sea una vez mas el 'club de amigos' el que acceda sin estorbos a la siempre ansiada 'adjudicación'".

 Dicen que aún resuenan en los pasillos del ministerio de Defensa casos icónicos como el "edificio 7" del complejo industrial CINAR, que fue licitado para su restauración al menos en 3 oportunidades pero al no resultar ganadora la empresa recomendada por López & compañía, se lo volvía a licitar con la esperanza de tener mejor suerte en la próxima.

 En 2010 desembarcó en la sede ministerial una todopoderosa empresa directamente enviada por López para realizar una tarea de relativamente bajo costo: el recambio de las "pizarras" (tejas) que forman parte del techo del coqueto edificio Libertador Gral San Martín. El costo de la obra oscilaba en los dos millones de pesos pero se gastaron además 15 millones en alquiler de andamios.

Para peor, las filtraciones de agua que originaron la necesidad de reparación se incrementaron notablemente una vez terminadas las tareas.

 "Mediocre calidad de construcción, mala calidad de los materiales, pésimas terminaciones, e innumerables vicios ocultos, parecen ser el denominador común de los emprendimientos de la mayor parte de las obras públicas realizadas por López y asociados; desde el Centro Cultural Kirchner, hasta una modesta escuela militar", afirmó la fuente, quien también reclamó una investigación judicial acerca de todas estas obras para que se desentrañe y quede en evidencia el alto nivel de corrupción existente en el ministerio de De Vido, y la secretaría de Obras Públicas en especial, y que se investigue si hubo complicidad de Nilda Garré en estas presuntas estafas que se describieron anteriormente.

No hay comentarios:

Publicar un comentario