lunes, 5 de septiembre de 2016

"PARA CALLARME, ME TIRARON UN DIFUNTO EN LA PUERTA DE LA IGLESIA"

SOCIEDAD / CURA BENEGAS 



El padre Alberto Benegas, cura párroco del barrio Libertador de Loma Hermosa, habló sobre su convocatoria a una marcha pacificadora prevista para el próximo sábado en la entrada del barrio donde el médico Lino Villar Cataldo mató al ladrón que intentó robarle. 


En declaraciones a AM 950 Belgrano, Benegas expresó: "Pacificar el barrio es todo un desafío a la buena voluntad y a organizarnos para seguir apostando por la paz porque hay mucha gente que quiere y necesita vivir en paz."

"Cuando veo dos jóvenes que circulan por la avenida principal del barrio y el de atrás lleva un arma me estremece y me da mucho miedo, no tengo la valentía para acercarme y decirle que deje el arma, busque un trabajo y cambie de vida", reveló.

En este sentido, contó: "El barrio Libertador es uno de los barrios de José León Suárez, en el partido de San Martín donde conviven paraguayos, bolivianos, peruanos y argentinos. Es un lugar donde ha crecido mucho la delincuencia, la venta de drogas y los desarmaderos de autos. Hay que trabajar mucho para frenar esto".

Sobre el caso de Villar Cataldo, opinó: "Veo dos familias destruidas donde ha mediado la violencia, lo que estamos viviendo es grave".

Sobre las amenazas que sufrió, Benegas comentó que "fue un acto de represalia. Hubo una pelea entre bandas, murió una persona y como mensaje al cura porque denunciamos al delito y la venta de droga".

"Como para callarme me tiraron un difunto en la puerta de la Iglesia. La policía me dijo 'Padre váyase porque el próximo es usted'", manifestó el cura.

"Pude irme pero decidí quedarme porque hay mucha gente de buena voluntad luchando contra este gran flagelo que sufren los niños, jóvenes y ancianos. Es como vivir permanentemente en riesgo, aún cuando estás durmiendo", sintetizó.

"Tenemos presencia policial en el barrio, ¿será que no alcanza?", dijo preocupado.

En tanto, remarcó que "la gente ya no confía en los políticos y el cura pasa a ser un referente."

"El encuentro del sábado es para reclamar paz y un compromiso para que las familias puedan reencontrarse y reconciliarse. Es difícil porque se que la familia del médico tiene que irse, es muy triste eso", concluyó.

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