FÚTBOL

Boca le ganó 1-0 a All Boys y es Campeón invicto

INVICTO Y MENOS VULNERADO

Boca cerró el Apertura 2011 con un triunfo ante All Boys, mantuvo el invicto y todos sus registros. Si bien fue superior a su rival de turno, la diferencia en el juego la pudo marcar cuando quedó con un hombre de más por la ‘exagerada’ expulsión del uruguayo Rodríguez a los 3’ del complemento.

 

CIUDAD DE BUENOS AIRES (Urgente24)  Además de la vuelta olímpica y un festejo programado, este partido jugado en la Bombonera servía para determinar un par de cosas. Primero, para saber si Boca podía coronarse campeón invicto y All Boys saber si al año lo terminaba fuera de la zona de Promoción.

Es decir, a pesar de ser el último partido del año con casi todo definido, tenía motivaciones extras importantes de ambos lados.

Aclarado esto, un dato no menor, Boca salió a jugar demasiado abúlico a pesar de que al minuto le anularon bien un gol ilícito anotado por Darío Cvitanich. El delantero se  llevó la pelota con la mano en el arranque de la jugada. Boca fue más que su rival pero se mostró lejos de ser ese equipo concentrado al que nos tuvo acostumbrados.

All Boys se mostró más concentrado quizás por aquello que su objetivo contaba con motivación doble. La de sumar puntos y la de dejar sin invicto al Campeón del Apertura, que también pujaba por mantenerse como la defensa menos batida. Tampoco para olvidar este detalle.

Antes de entrar en detalles del partido, otro dato que no se podía soslayar en lo previo. Campeones que lo hicieron sin perder un partido, no fueron muchos. San Lorenzo (Metropolitano 68 y Nacional 72), más los conjuntos de Ferro (Nacional 84), River (Apertura 94) y el mismo Boca (Apertura 98). ¿Algo más?

El partido empezó flojito y algo se encendió cuando promediaba la etapa. A los 21’ Matos le perdonó la vida a Boca cuando intentó gambetear a Agustín Orion que se quedó con la pelota y a los 22’ Nicolás Cambiasso le tapó el gol el Pablo Mouche en un mano a mano. Por lo menos el partido entregaba algo de emoción en las áreas.

Esas acciones enchufaron un poco a Boca en el partido y por eso dominó el monopolio del balón hasta el final de la etapa y casi marca con un cabezazo de Darío Cvitanich que se fue por arriba del horizontal desde posición inmejorable.

All Boys siguió agazapado viendo si podía armar algún contragolpe que en la primera parte nunca llegó.

A los 3’, All Boys fue víctima de una jugada que lo perjudicó. Juan Pablo Rodríguez, que le tiró un puñetazo a Rolando Schiavi porque se fastidió de que el defensor le metiera plancha y codazo a dúo, vio la roja por parte de Gabriel Favale. La verdad, más justo hubiera sido que se fuera expulsado también el defensor de Boca por la dureza de la entrada.

Este detalle terminó condicionando lógicamente al visitante y le terminó quitando armas y posibilidades. Por motivos obvios en los minutos siguientes a la expulsión de Juan Pablo Rodríguez, Boca se fue encima del arco de Cambiasso pero no pudo transformar sus ataques en combinaciones peligrosas. A Boca le seguía faltando profundidad.

All Boys, a pesar de todo, no resignó pensar que podía marcar un gol y cada tanto intentaba avanzar mirando fijamente el arco de Orion. Cuando se jugaban 20’ todavía le quedaba más que lejos.

A los 20’ Boca se perdió otro gol y el protagonista fue Cvitanich. Chávez lo dejó sólo por izquierda y tras sortear al arquero, su remate esquinado fue débil y un defensor evitó el primer tanto de la noche. Boca ya se le había venido muy encima a All Boys que comenzaba a caminar por la cornisa.  

Definitivamente, Favale arruinó el partido de All Boys con la expulsión de Rodríguez. Si de igual a igual ya era complicado, imagine con uno menos. ¡Estos árbitros!

Un momento emocionante, además de todo lo demás, fue el ingreso de Battaglia a los 28’ en lugar de Mouche. Falcioni quiso seguir sumando afectos de la gente de Boca y los mimó con el cambio. Claro, no se animó a sacar a Somosa y hacer cambio de puesto por puesto porque Sebastián hoy no garantiza coberturas. Lógico.

Y a los 33’, tanto va el cántaro a la fuente que la termina rompiendo. Cvitanich metió un cabezazo tras un buen centro de Erviti y Boca pasó a ganar el partido 1-0. Se veía venir el gol y llegó. Definitivamente, Boca cerró una campaña bárbara en cuanto a números.

Estiró su invicto a 29 partidos, terminó invicto (12 ganados y 7 empatados) y como el menos vulnerado, ya que su arquero sólo recibió 6 goles en 19 partidos contra los 7 que recibió a Saja en Racing, aunque sabiendo que debe un partido con Vélez en Liniers.

¡Boca Campeón invicto como en el 98!  El hincha de Boca puede volver a festejar.