viernes, 10 de marzo de 2017

TRANSICIÓN, REFUERZO Y CONSOLIDACIÓN: "MACRI VA RECIÉN POR LA ETAPA 1"

ECONOMÍA / CONGRESO ECONÓMICO ARGENTINO 



El economista Orlando Ferreres sostuvo que la gestión de Mauricio Macri atraviesa hoy una etapa de transición y que recién dentro de 4 años se va a estar enfocando la solución de las fallas macroeconómicas. 


 Ferreres participó junto a Daniel Heymann, Daniel Artana y Roberto Frenkel en un panel del Congreso Económico Argentino, en el marco de la Expo EFI, en el que los cuatro destacados economistas expusieron su visión sobre la coyuntura económica y en el que coincidieron en el que el gasto público es uno de los desafíos principales del Gobierno.

 Según Ferreres, la primera etapa del gobierno de Macri, la de "transcición", abarca el año pasado y este y está marcada por las decisiones de política económica que marcaron el rumbo del modelo actual: la eliminación de retenciones cambiarias, la salida del default, el ajuste gradual de tarifas, la suave desinflación, una fuerte emisión de deuda, poco ajuste en el gasto público y una recuperación gradual del crecimiento, que estimó en 3,5% para este año.

 "Estamos en la primera etapa. No digo que va muy bien, pasa que uno quisiera que fuera más rápido", aseguró el economista según reprodujo esta mañana el diario 'El Cronista'.

 En la etapa siguiente, que proyectó para 2018 y llamó "refuerzo", pronosticó que "van a subir las tasas de interés globales y va a haber mayor volatilidad cambiaria".

Como consecuencia, "colocar deuda se va a volver más difícil y como va a ser más cara, vamos a ir hacia el ajuste fiscal, que cuando uno lo dice todo el mundo se queda callado, pero es lo que va a pasar", indicó.

 Para la etapa que llamó de consolidación, en 2019, auguró que finalizarán los ajustes de tarifas, se suavizará el ajuste fiscal, la inflación alcanzará los niveles internacionales en torno de 4 o 5% anual y se recompondrá la entrada de divisas.

 Respecto del valor del tipo de cambio, sostuvo que hoy está "atrasado". "Es un problema serio. Estaríamos más cerca de 25, pero es difícil que esté en 15 pesos", calculó. "Son dos etapas: el año pasado y este seguimos con la misma, a ver si podemos ganar las elecciones.

Y posteriormente tenemos que hacer un ajuste para lograr convencer a la gente de que invierta", cerró el economista. Roberto Frenkel, por su parte, focalizó su análisis sobre las causas de la inflación actual, considerando incluso las del final de 2015, y en cómo influyen en el aumento de precios minoristas de cada mes los distintos componentes.

 Frenkel analizó la inflación desde octubre de 2015, ya que consideró que los aumentos pre devaluación que ocurrieron después de las elecciones por la expectativa de una modificación del tipo de cambio debían ser tenidos en cuenta en el análisis. A partir del modelo que simuló con datos de la consultora Ecolatina, calculó que el 59% del resultado de inflación de un mes tiene que ver con la inercia inflacionaria.

 El restante 41% son "variables concomitantes", de las cuales, a su vez, el 41% responde a la tasa de aumento del salario promedio del trabajador registrado del sector privado; el 27,2%, a la tasa del tipo de cambio nominal, y el 31,4% otras variables (precio carne Liniers, precio soja internacional, precio en dólares insumos intermedios importados y productividad).

 El economista calculó que las tarifas subieron un 91,3% desde octubre de 2015, la inflación acumulada a enero de 2017 fue de 52,6% y que el tipo de cambio ascendió 67,7%, mientras que el salario lo hizo en 46,8%.

 "El salario medio de los trabajadores registrado cayó 4%. Había caída más de 10% a mediados de año, pero se recuperaron en el segundo semestre", aseguró Frenkel. El analista consideró que "el salario real está subiendo a fuerza de que sube el salario medido en dólares, lo cual hace muy difícil abrir la economía y aumentar la productividad".

 El economista de FIEL, Daniel Artana, habló sobre "la herencia K"y el "legado cultural" que dejó que valoriza "el consumo y no la inversión", y que por eso se están sosteniendo los niveles de los momentos en que la soja cotizaba en torno de los US$600 dólares la tonelada y Brasil no había caído en la peor recesión de su historia.

 "La herencia k fue muy pesada en lo económico y en lo cultural, porque todos dicen que hay que motorizar el consumo y no las inversiones", dijo el economista, y apuntó: "Nos estamos endeudando para sostener niveles de consumo que eran posibles cuando teníamos otros precios de nuestros productos y Brasil en otras condiciones".

 El analista de FIEL advirtió: "La pregunta es si esto transitorio. Si el shock es permanente, la cuenta de la tarjeta de crédito hay que pagarla. Es difícil que vuelva la soja a 600 dólares la tonelada y tampoco Brasil con el tamaño en dólares que tuvo. Así que tenemos que ir corrigiendo".

 "Tenemos una recuperación que nos vuelve a poner en un nivel de 2011, porque este año la economía va a crecer en torno del 3%. La clave es cómo hacemos para salir de esta trampa de estancamiento con inflación alta", indicó.

 Sin embargo, señaló que hay "cierta fragilidad en los flujos (…) porque hay déficit fiscal y déficit externo" y "ambos están interrelacionados". "El déficit fiscal fue de 15.000 millones de dólares y tampoco hubo inversión extranjera directa . Como no había muchas reservas, se empezaron a endeudar. El 40% de déficit se explica por gastos en turismo por veraneo en el exterior", detalló.

 Al finalizar, Artana indicó que el "gobierno no puede darse el lujo de anunciar un programa fiscal y no cumplirlo".

No hay comentarios:

Publicar un comentario