domingo, 8 de enero de 2012

JUSTICIA

EL PODER TIENE SUS PRIVILEGIOS
Caso Soria: Irregularidades + irregularidades
 Si Susana Freydoz careciera de recursos políticos y económicos, sin duda que su situación judicial sería bien diferente. Sospechada de asesinar a su marido Carlos Soria, gobernador de Río Negro, y madre del alcalde de General Roca, Freydoz vive una situación imprecisa que la beneficia temporalmente, pero que sigue provocando comentarios.


 CIUDAD DE BUENOS AIRES (Urgente24). El juez Pablo Chirinos estuvo ayer (sábado 07/01) en Allen con la viuda de Carlos Soria, Susana Freydoz, informó el diario Río Negro, de General Roca, localidad cabecera de departamento y donde ocurrió la muerte del entonces gobernador rionegrino. Chirinos dijo que llegó a la ciudad para entrevistarse con la única imputada del caso, aunque no reveló si finalmente pudo hacerlo. "La vi muy mal", aseguró al retirarse del domicilio sin hacer mayores declaraciones.

Allen es una ciudad y municipio del departamento General Roca, a 20 km. al este de la ciudad de Neuquén, a 16 km. al este de Cipolletti y a 25 km al oeste de Gral. Roca.

Es la Capital Nacional de la Pera, en las crónicas de la Conquista del Desierto identificada por una laguna llamada Huiaque Nelo ("el que tiene la lanza" o "que tiene forma de lanza") y fue rebautizada con el apellido de Henry Charles Allen, inglés directivo de la compañía Ferrocarril del Sud desde 1883.

El magistrado Chirinos arribó a la céntrica casa de calle San Martín 72 donde permanece Freydoz, cerca de las 11:30, acompañado por un perito de la Unidad 6ta. de Allen.

La visita de Chirinos fue rápida y pasó prácticamente inadvertida para los habitantes de la comuna. El juez llegó vestido de bermuda, chomba y ojotas, y sólo permaneció en el domicilio por poco más de media hora.

El hijo del gobernador fallecido e intendente de General Roca, Martín Soria, su hermana María Emilia, y otros familiares habrían estado presentes durante la visita del juez Chirinos.

Según trascendió, el magistrado supervisó algunas de las pericias judiciales que habría ordenado realizarle a Susana Freydoz.

Durante el procedimiento se le habría efectuado a la viuda de Soria una ficha de sus huellas dactilares para avanzar en la investigación de la causa.

Chirinos no confirmó cuándo se le practicará la pericia psiquiátrica a Freydoz.

Algunos minutos después abandonó la casa de la calle San Martín el médico psiquiatra que atiende a Susana Freydoz, Luis Di Giacomo, concejal de General Roca y simpatizante político de Soria. El profesional confió que el estado de la mujer sigue siendo muy complejo y agregó que "continúa recibiendo medicación".

Como parte del tratamiento psiquiátrico que lleva adelante, Di Giacomo examina a Freydoz 2 veces por día.

Todavía se recuerda la declaración de Martín Soria, alcalde de General Roca, ante los periodistas:

“Cuando entré a esa habitación no lo voy a olvidar jamás; ni lo que vi ni lo que estamos viviendo. Sinceramente vi, no al gobernador, no a un dirigente político. Vi a mi padre irse. El cuadro que vi no se lo deseo a nadie. Es indescriptible. Fue desgarrador verle la cara a mi madre. Es un momento trágico para mi familia. Mis padres juntos eran una verdadera tempestad".


Raúl Kollman en el diario Página/12:

"(...) Algunos sostienen que el mandatario le anunció a su esposa que no viviría con ella en la residencia de la gobernación, en Viedma, mientras que fuentes vinculadas al juzgado de Juan Pablo Chirinos admiten que aquella noche hubo mensajes de texto de una tercera en discordia y una situación de “muchos celos” por parte de Freydoz. A esta altura parece estar claro que Soria estaba tendido en la cama, su esposa dio toda la vuelta al lecho, tomó el revólver calibre 38 de la mesita de luz y le disparó en la cara. No hubo forcejeo ni el tiro salió sin querer. Sólo en las manos de Freydoz se encontró plomo, antinomio y bario. El análisis de la herida de Soria indicó que le dispararon a más de 50 centímetros, lo que corrobora que no hubo forcejeo.

Las mayores polémicas e interrogantes se producen por la forma en la que se manejó el caso hasta ahora:

1. ¿Debería estar detenida la esposa de Soria?

Casi todos los jueces consultados por este diario admiten que si la misma situación se diera en un hogar humilde, la mujer hubiera sido detenida en el momento. Tal vez no se la enviaría a una cárcel, pero –tomando como base que no tiene antecedentes– se la recluiría en una comisaría u otra dependencia policial.

Algunos magistrados creen que lo que correspondía era que estuviera detenida e incomunicada en un hospital o clínica, teniendo en cuenta su situación psiquiátrica, pero no en libertad como se encuentra actualmente. “Es el delito más grave del Código Penal, asesinar al marido o a la esposa. Estamos dando una muy mala señal”, sostiene un camarista penal de San Isidro.

El juez Chirinos, en cambio, con una trayectoria de garantista, considera que la mujer no puede alterar pruebas ni incidir en la investigación. El magistrado iría camino a imputar a Freydoz por homicidio doloso –la hipótesis más grave, con una pena de prisión perpetua– pero aun así considera que puede estar en libertad.

2. ¿Es correcto que Freydoz no esté incomunicada?

También la mayoría de los jueces piensa que a la esposa de Soria y a su defensa le han dado todas las ventajas. Va a tener 15 días para preparar su declaración y, además, con todas las pericias ya hechas e incorporadas al expediente, de manera que alguien desconfiado puede alegar que Freydoz va a declarar teniendo en cuenta los ángulos de disparo, la distancia y las evidencias físicas que están en la causa. Tal vez podría armar una historia diferente de la real, pero ajustada a lo que ya indican las pericias. No se trata de una ventaja que se le otorga a un imputado habitual de homicidio.

3. Va a declarar el 16 de enero, ¿está dentro de la lógica?

Tanto en Río Negro como en el resto del país, los códigos procesales indican que se le debe tomar declaración indagatoria a un sospechoso en un lapso breve. En el caso de Río Negro, el artículo 269 habla de 24 horas. Por supuesto que una persona imputada puede presentar –como en este caso– un certificado médico de que no está en condiciones. Sin embargo, lo llamativo para los jueces consultados por este diario es que Freydoz no se presentará a declarar cuando esté psíquicamente mejor de acuerdo a un certificado, sino cuando haya regresado el juez que intervino el primer día, Emilio Stadler, el día 16 de enero. Como es obvio, ya surgieron los rumores de que esta movida obedece a que Stadler es más “dócil” o “manejable” que Chirinos. Basta ver que el titular de la Corte Suprema rionegrina dijo que “todo se encamina a la emoción violenta”, lo que permitiría a Freydoz esquivar la prisión, mientras que Chirinos sostuvo públicamente que los indicios apuntan al “homicidio doloso”, que prevé prisión perpetua.

4. Emoción violenta

Hay mucho debate sobre esa figura. El artículo 81 del Código Penal dice textualmente: “se impondrá reclusión de tres a seis años o prisión de uno a tres años al que matare a otro en estado de emoción violenta y que las circunstancias hicieran excusable”. El caso típico que se enseña en las facultades es el del hombre o mujer que llega a su casa y encuentra a su pareja en una relación con otro. El encuadre de la emoción violenta garantizaría en el caso Soria que la mujer no vaya a prisión.

Mariano Castex, uno de los más conocidos psiquiatras forenses, sostiene que la figura es muy difícil de probar, porque apunta a una especie de “locura transitoria” que es casi imposible de verificar. Respecto a Freydoz, hay un examen médico realizado un par de horas después de ocurrida la tragedia en que el profesional la encontró “con ubicación de tiempo y espacio”. La defensa alegará que se trató de un médico forense, no de un psiquiatra. (...)".

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