viernes, 6 de abril de 2018

RIVER VOLVIÓ A EMPATAR Y SIGUE SIN GANAR EN LA COPA LIBERTADORES

DEPORTES / FÚTBOL 

José  Brusco / POPULAR

(DIARIO POPULAR) - La de este jueves de River fue una versión como la de los tiempos, cuando jugaba mal. Atrás quedaron los triunfos en continuado y los buenos rendimientos de algunos de jugadores clave. Por eso no ganó en el Monumental contra Independiente Santa Fe Bogotá en la segunda presentación de la Copa Libertadores de este jueves por la noche. Y por eso, además, no pudo encaminarse como líder junto a Flamengo, lo que hubiera sido certero para manejar los tiempos futuros. 


Ahora necesitará ganar en Ecuador o Colombia para no sufrir en el pase a la fase final. Pero lo que necesitará pronto es que no se le haga costumbre algunos bajos rendimientos, como en el cruce ante los cafeteros, en jugadores indispensables como los de Pity Martínez, Rodrigo Mora, Nacho Fernández y los laterales, Gonzalo Montiel y Marcelo Saracchi.

Lo del primer tiempo fue flojo para River. Apurado en la gestación y desprolijo en la recuperación, el Millo no pudo causar males a los colombianos. Apenas contó con un par de apariciones de Enzo Pérez, rompiendo por la banda derecha, y un tiro libre de Mora.

El planteo de Gregorio Pérez, DT del conjunto rival, con tres delanteros tapando las salidas de los laterales fue una clave letal porque le quitó herramientas a los conducidos por Marcelo Gallardo. Si a eso se le suma que los dos volantes centrales Yeison Gordillo y Baldomero Perlaza fueron una máquina de presionar y tapar las salidas de esa zona. El juego de River estaba cortado, enmarañado y sin ideas.

Una cosa llevó a la otra y como no podía, el equipo del Muñeco se apresuraba, no tenía paciencia y en especial el Pity y Nacho equivocaron pases, abusaron de pelotazos y dejaron a los puntas sin chances de quedar en zona de gol.

Así, los primero 45 minutos se consumieron sin jugadas claras de gol y con una notable falta de juego colectivo que, esta vez, las respuestas individuales no resolvieron.

Para la parte final y como el juego seguía en esa misma monotonía, Gallardo se cansó y llamó a Nacho Scocco y a Juanfer Quinteros. Afuera Mora y Nacho Fernández.

Esos cambios causaron efecto en un River que se llenó de furia y lo fue a buscar con otra actitud. Fue un ratito en los que debió haber anotado, pero no estaba fino. La más clara fue de Lucas Pratto que le sacó con la cara Arboleda en la línea.

También anduvo cerca el Pity con una salida rápida de un lateral, un tiro libre de Quinteros que sacó Zapata y un tiro del colombiano que se apuró en patear, algo que fue un sello del equipo.

Pero la más clara la tapó Armani. Fue una pelota que casi sacó de adentro en un tiro de Gordillo en el área chica. No lo perdió en esa jugada de casualidad el equipo de Gallardo.

Los minutos finales fueron un desorden y un susto en cada contra de la visita. Nada iba a cambiar.

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